En el marco del crimen del ministro de Desarrollo Social Juan Carlos Rojas, el fiscal Hugo Costilla remitió 10 celulares secuestrados para que sean peritados por Gendarmería Nacional Argentina en Catamarca.
Sin embargo, no pudieron desbloquear los dispositivos y el fiscal decidió enviarlos a Buenos Aires para que personal de Gendarmería de dicha provincia realice las pericias y lograr acceder a la información de los teléfonos móviles, que en total serían 15.
La visualización de los equipos ya había iniciado y podrá continuar si logran destrabar el inconveniente. Los mismos pertenecen a personas ligadas a la investigación del homicidio y se busca conocer detalles sobre las llamadas de "Rojitas" con Silvina Nieva, la única imputada por el hecho, y otros individuos.
La intención es recuperar los mensajes y llamadas que se podrían haber eliminado y paralelamente se busca obtener datos relevantes en inmediaciones al inmueble del ministro asesinado.
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