La poda de Javier Milei a los fondos destinados a la obra pública paralizó varios trabajos de infraestructura importantes en Catamarca. Entre ellos, los adjudicados a la misteriosa empresa UMG Compañía Minera SRL, que en apenas un año se quedó con un paquete de obras que a septiembre pasado sumaba más de $9.200 millones. Eran los tiempos en que la Nación derramaba fondos en las “provincias amigas”. Y eran, también, los tiempos en que esos recursos pasaban por el despacho de Eduardo Niederle, exministro de Infraestructura y Obras Civiles (IyOC), hoy reasignado en la cartera de servicios públicos.
En el transcurso de 2023, UMG fue adjudicada por la Provincia en 6 licitaciones, de las cuales en 5 compitió solo con otro oferente: Astori Construcciones SA, segunda firma del gigante cordobés Astori Estructuras. No participó, curiosamente, ninguna empresa catamarqueña.
Las obras adjudicadas a UMG fueron las siguientes:
- Nuevo módulo para el Hospital San Juan Bautista (Capital)
- Nueva Terminal de Ómnibus de Belén.
- Parque de los Palmares (FME)
- Escuela Técnica Profesional de Tinogasta.
- Escuela Técnica Profesional de Santa María.
- Apertura de traza y conformación de superficie del empalme para la RN 40 entre Asampay y El Tolar (Belén)
Los detalles de los presupuestos aprobados, las actualizaciones de precios y el estado de esas obras fueron publicados por INFORAMA en agosto pasado.
La irrupción de UMG Compañía Minera en el campo de la obra pública en Catamarca fue una auténtica sorpresa. Porque la empresa se creó en 2019 y recién se inscribió en AFIP en octubre de 2020. Registró su domicilio legal en un barrio de La Rioja. Sus propietarios declarados fueron Lucas Daniel Parra, abogado y dueño del 75% de las acciones. Los socios minoritarios: Mirta Mariela Morales (20%), empleada pública, y Eliana Moyano Vega Aciar (4,5%), médica. Todos con domicilio en la capital riojana.
Al momento de ganar la licitación para la construcción del nuevo módulo en el Hospital San Juan Bautista (HSJB), en mayo de 2023, UMG no figuraba en el Registro de Proveedores del Estado (Compr.ar), ni tampoco en el Registro Público de Comercio, con lo cual quedaba al margen de la Ley de “Compre y Contrate preferentemente catamarqueño”. Y lo que es más extraño aún: carecía de antecedentes en la obra pública.
Con todo, Niederle permitió que la desconocida empresa se presentara en las licitaciones de Catamarca y, luego, le adjudicó media docena de obras. La más emblemática de todas, por lo que significa en cuanto cabecera del sistema público de salud, fue la ampliación del San Juan Bautista. Pero también fue la que recibió la mayor redeterminación de precios: pasó de $1.160 millones en mayo de 2023 a $3.967 millones en septiembre, es decir, un 242% más.
No va más
¿Por qué tanta displicencia con los recursos públicos? Porque la obra del hospital se financiaba con fondos nacionales; y hoy, como se sabe, el grifo de la administración Milei se cerró hasta nuevo aviso. Consecuencia inmediata: los trabajos quedaron suspendidos. Más aún, parece ser decisión tomada que no continúen más.
De hecho, el lunes último el gobernador Raúl Jalil retomó el viejo proyecto del Polo de Salud. Dijo que en su reciente viaje a Misiones pudo ver un modelo que le pareció aplicable a Catamarca, y que por supuesto se construirá con fondos provinciales. Ya lo había anunciado en 2020, cuando en conjunto con el municipio capitalino se adquirieron dos terrenos al Obispado de Catamarca con destino al futuro Polo sanitario.
Hay otro hecho que confirma el final de la obra de ampliación del HSJB. También esta semana el ministerio de IyOC, hoy a cargo de Juan Alberto Marchetti, informó el inicio de trabajos de remodelación y acondicionamiento en las salas de Tomografía y Mamografía, y en el ingreso al hospital por avenida Illia, para la descarga de tubos de oxígeno y otros insumos. En otras palabras, arreglos mínimos y necesarios ante la caída del proyecto principal.
Ahora el Gobierno deberá decidir qué hacer con el espacio que tenía la playa de estacionamiento del hospital, antes rodeada de plantas y árboles y hoy convertida en tierra arrasada. La empresa alcanzó a despejar el lugar y levantar algunas columnas de lo que supuestamente sería el nuevo ingreso.
¿Cuánto cobró UMG por lo que hizo en el San Juan Bautista? Según fuentes oficiales consultadas por INFORAMA, la empresa no recibió más de dos anticipos de obra. No hubo más precisiones.
Otras obras
La misma suerte del HSJB corrieron las obras de construcción de las escuelas técnicas en Tinogasta y Santa María, que también se llevaban adelante con fondos de la Nación. El Gobierno provincial, por ahora, no las ejecutará con recursos propios.
Muchas menos chances tiene el Parque de Palmares, en Fray Mamerto Esquiú. Para la Provincia, se trata de una obra fuera de las prioridades del momento. UMG alcanzó a desmalezar el predio sobre la ruta 1 y empezó con el acopio de material de relleno, ya que se encontró con napas de agua subterránea que dificultaban los trabajos. No hizo nada más. Hoy solo puede verse el cartel oficial y un obrador que pronto será historia.
En cambio, es posible que la constructora riojana no se retire de Catamarca con las forjas vacías en lo que respecta a la nueva Terminal de Ómnibus de Belén, cuyo presupuesto ascendía a $1.109 millones. La empresa UMG la recibió a medio construir y en septiembre de 2023 aseguró que la obra ya contaba con un “50 por ciento” de avance.
En este caso, a diferencia del resto, la Terminal belicha fue una licitación privada cuyo único oferente fue UMG. Y el financiamiento está a cargo del Fideicomiso Minero. La obra está frenada momentáneamente hasta tanto los administradores del fondo actualicen los precios de la construcción.
Corriendo el velo
En enero pasado, se presentaron dos hombres en las oficinas de Infraestructura y Obras Civiles, en el CAPE. Querían saber por la situación de las obras en marcha y los correspondientes pagos. Uno de ellos era el apoderado de UMG, el abogado Federico Escudero, el mismo que recibió el contrato de la nueva Terminal de Belén de manos del gobernador Jalil, y el otro era un hombre que parecía preferir el perfil bajo.
Se trataría de Ernesto Gait Badra, empresario cordobés propietario de las empresas Cor-Vial y Vialerg. La primera es fabricante de palas cargadoras, palas con retroexcavadora, motoniveladoras y camiones de bacheo y asfalto. La segunda vende camiones, acoplados, equipos viales, ambientales, de agro y minería, entre otros. Y ambas trabajan en todo el país.
Vialerg trabajó intensamente con el gobierno de La Rioja, más en la gestión de Ricardo Quintela, con empresas estatales de agro, viales y de agua. Entre ellas, la firma cita en su web a Rioja Vial SAU, una “Sapem” que estuvo a cargo de Lucas Parra, el accionista principal de UMG Compañía Minera. Demasiadas coincidencias.
#estamosentregando El Director de @vialerg Ernesto Gait Badra haciendo entrega al Gobernador @QuintelaRicardo #LaRioja
— VIALERG S.A. (@vialerg) October 25, 2021
¡Gracias @GobDeLaRioja por confiar! pic.twitter.com/SZRB0E5z5o
Es probable que el desembarco de UMG en la obra pública de Catamarca haya sido resultado de contactos políticos previos -y por demás habituales- con el gobierno riojano.
Solo así se puede entender que hubiera tanta permisividad para no cumplir las normas exigidas a cualquier empresa en procesos licitatorios.
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