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Clínicas privadas en peligro por las tarifas de energía impagables

Los costos operativos superan los ingresos generando un considerable perjuicio económico.
Por Redacción Inforama

El presidente de la Federación de Clínicas y Sanatorios (FECLISA), Jorge Saavedra, emitió una advertencia sobre la situación crítica que enfrentan las clínicas privadas debido al alarmante aumento en los costos de la energía eléctrica.

Según Saavedra, desde noviembre hasta la fecha, se registró un incremento entre un 300 y un 400% en las tarifas eléctricas, lo que está impactando gravemente en el sector de la salud.

En sus declaraciones a la prensa, Saavedra destacó la dificultad de detener el consumo eléctrico en las clínicas, ya que muchos equipos médicos, como los aparatos de rayos X y los sistemas de aire acondicionado, necesitan estar en funcionamiento constante para atender a los pacientes.

Esta situación genera un perjuicio económico considerable, ya que los costos operativos superan los ingresos, especialmente ante la falta de una recomposición arancelaria por parte de las obras sociales.

"Tenemos una demanda fija y esta suba nos causa un gran perjuicio económico porque tampoco está previsto, no tenemos una recomposición arancelaria de muchas obras sociales y los gastos están superando los ingresos", afirmó Saavedra.

El presidente de FECLISA también hizo hincapié en el aumento excesivo de los insumos médicos, algunos de los cuales registraron incrementos de hasta un 100%. Esta situación se agrava por la escasez y los altos costos de los insumos importados, lo que obliga a recurrir a alternativas nacionales que, aunque más económicas, no siempre son suficientes para cubrir la demanda.

Ante esta situación, Saavedra reveló que se realizaron gestiones con las autoridades pertinentes para obtener algún tipo de subsidio o tarifa diferenciada en el servicio eléctrico. Sin embargo, el panorama no parece alentador, ya que no se vislumbra una reducción en los precios de las tarifas ni medidas para aliviar la carga económica de las clínicas privadas.

"En el ritmo que viene yo creo que esto nos va a causar un grave perjuicio porque no vemos que haya una intención de congelar las tarifas, de reducir algunos precios o tratar de bonificar a algunos sectores", expresó Saavedra con preocupación.

En vista de esta situación, FECLISA evalúa la posibilidad de reducir algunos servicios que requieren un alto consumo de energía eléctrica como medida para mitigar el impacto del aumento en las tarifas. Sin embargo, esta medida podría afectar la calidad de atención y el acceso a la salud de los pacientes.