Los senadores nacionales verán un aumento en sus salarios, pasando de $7 millones a $8 millones por mes. Este incremento forma parte del acuerdo paritario que los vincula con los trabajadores del Congreso, lo que implica un aumento del 9% en los módulos que componen sus dietas.
En mayo, los senadores cobraban un monto bruto de $7 millones, y ahora, con el nuevo incremento, sus sueldos brutos ascenderán a $8 millones. En términos netos, esto significa que los senadores recibirán más de $5 millones en mano a partir del próximo mes, un aumento considerable respecto a los $4,5 millones que recibieron recientemente.
La resolución que establece este incremento fue acordada entre los bloques y la vicepresidenta, Victoria Villarruel. Las dietas de los senadores se componen de 2.500 módulos de $1.800 cada uno, más un adicional de 1.000 módulos por gastos de representación y 500 módulos adicionales por desarraigo, aunque este último solo lo cobran actualmente cuatro senadores. Además, se añadirá una dieta adicional a las 12 actuales para compensar el aguinaldo.
El aumento generó controversia y enojo, teniendo en cuenta el contexto económico de país. Aunque los legisladores libertarios no apoyaron la medida, argumentando que la clase política debería hacer un esfuerzo, todos los senadores cobraron el incremento.
El aumento salarial también llevó a los diputados a presentar sus propios reclamos al presidente de la Cámara, Martín Menem, quien prometió que se abordará el tema tras el debate de la Ley Bases, aunque aún no hubo ningún cambio concreto.
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