Catuchas

Los detalles de la noche legendaria en la que Walter Olmos y La Mona cantaron juntos

Esa noche el cordobés recibió una imagen de la Virgen del Valle como obsequio del joven cuartetero y su banda "Los Bingos".
Por Redacción Inforama

Hace 23 años, el 23 de agosto de 1998, una noche legendaria tuvo lugar en el boliche La Casona, departamento Fray Mamerto Esquiú de la provincia de Catamarca. Walter Olmos, un joven cantante fanático de "La Mona" Jiménez, tuvo la oportunidad de unirse al ícono del cuarteto en el escenario.

Fue una ocasión histórica en la que La Mona no solo apadrinó a la banda local "Los Bingos", liderada por Walter, sino que también compartió el micrófono y llamó a los músicos para acompañar a Olmos con los instrumentos de su banda.

Fernando Cerezo, integrante de Los Bingos, le regaló a Jiménez una imagen de la Virgen del Valle en el escenario en nombre de todos y el cordobés les agradeció con emotivas palabras.

Días después de este encuentro, en las instalaciones de FM La Casona, Walter Olmos conoció a "El Potro" Rodrigo Bueno, quien lo llevó para unirse a su banda. Esto marcó el inicio de la carrera meteórica de Walter Olmos en el cuarteto.

La vida de Walter Olmos estuvo marcada por desafíos y precariedades en las calles de nuestra provincia, donde se ganaba la vida lavando autos, lustrando zapatos y vendiendo diarios. Sin embargo, su pasión por el cuarteto, heredada de su madre fanática de La Mona, lo impulsó a la música.

En una foto inédita tomada en Catamarca, se observa a La Mona Jiménez sonriendo mientras lustra los zapatos de Walter Olmos y sus amigos en el Hotel Leo III. Este encuentro marcó la vida de Walter, quien más tarde se convertiría en una leyenda del cuarteto, siguiendo los pasos de sus ídolos.

Walter Olmos y La Mona juntos en Catamarca: el día que el ícono cordobés fue lustrabotas

Años después, en una noche histórica para el cuarteto, Walter Olmos y La Mona Jiménez se encontraron nuevamente en Córdoba, ofreciendo espectáculos cercanos en la ciudad. A pesar de la rivalidad mediática, ambos artistas llenaron sus respectivos recintos y demostraron su respeto mutuo, celebrando juntos la grandeza del cuarteto.

Ese día, La Voz del Interior publicó en la previa: "Para el concierto que Walter Olmos ofrecerá hoy, se habilitaron en primera instancia tres mil entradas, que se agotaron en cinco horas el último día del mes de abril. La Municipalidad tardó un tiempito en autorizar dos mil más, y se instaló la sospecha de que a Walter le estaban 'embarrando la cancha'. Entretanto, su disco A pura sangre, grabado en vivo en Tucumán, se vendió a buen ritmo en las disquerías de la Docta. Todo sucede en un momento en que los grandes del género cuartetero no editan nuevos registros. No obstante, Walter es comprado como fenómeno por todos los noticieros".