Lucho Herrera, de 38 años, ha dedicado gran parte de su vida al arte del tatuaje. Desde sus primeros trazos en las paredes y bancos de la escuela, Lucho descubrió su pasión por el dibujo. "Empecé a dibujar y dibujar, a todo el mundo le gustaba lo que dibujaba", recordó en entrevista con INFORAMA. Su camino en el tatuaje comenzó cuando un amigo le regaló una máquina usada. "Hice mi primer tatuaje y no paré más, rayé a todos los que se me cruzaban y así sigo hasta el día de hoy", agregó.
Para Lucho, el tatuaje va más allá del arte en la piel: "El tatuaje es algo muy significativo para cada persona. A veces vienen y me cuentan sus historias y por qué se hacen el tatuaje. Hay muchas cosas de fe y cosas muy locas también. Yo también plasmo parte de mi vida en mi cuerpo, las personas hacen lo mismo", comentó.
A pesar de las dificultades económicas y los desafíos actuales, Lucho se enorgullece de tener muchos clientes satisfechos que lo eligen como su tatuador. "Tengo un montón de clientes, la mayoría queda feliz y me buscan. Sigo todos los días tatuando y agendando turnos. Después de tantos años, creo que lo sigo haciendo bien. Esto no para, es seguir haciendo y aprendiendo", dijo en diálogo con este medio.
Tatuador de vieja escuela
Lucho se define a sí mismo como un "tatuador vieja escuela" y se inclina hacia el estilo tradicional en su trabajo. Le gusta jugar con líneas sólidas y finas, y prefiere evitar el realismo o los tatuajes que se desgastan con el tiempo. "El tatuaje tradicional perdura en el tiempo, me gusta ver un tatuaje mío de 5 años y que siga intacto. Por eso me gusta ese estilo", comentó el artista.
En cuanto a la clave para un buen tatuaje, según Lucho se trata de la conexión entre el tatuador y el cliente. Escuchar y comprender las ideas del cliente permite crear un diseño que sea significativo y personalizado. "La conexión es fundamental", afirmó.
El tatuaje más loco
En su larga trayectoria como tatuador, Lucho ha experimentado todo tipo de solicitudes y proyectos, pero hay uno en particular que destaca como el más inusual. "Creo que lo más loco que he tatuado fueron escamas en las plantas de los pies. Eso fue realmente sorprendente", reveló entre risas.
Momentos gratificantes
Para el artista, lo más gratificante de su trabajo son las relaciones que ha construido con sus clientes a lo largo de los años. "Hay gente que empezó hace un montón de años a tatuarse conmigo y hoy son mis amigos. Tengo un montón de amigos gracias al tatuaje", comentó con una sonrisa.
Por otra parte, hay un momento especial en su carrera que también lo atesora con mucho cariño "lo que más me gustó tatuar fue la espalda de mi novia en un competencia, en la que encima sacamos el primer puesto".
Competencias y exposiciones
A lo largo de su trayectoria, Lucho ha participado en diversas competencias de tatuaje, obteniendo reconocimientos destacados. El año pasado, ganó el primer puesto en Córdoba, el segundo puesto en Tucumán y nuevamente el primer lugar en Catamarca. "Que te den un premio es muy lindo, me siento que estoy a la altura de competir con cualquiera", compartió emocionado.
Mirando hacia el futuro
Lucho tiene invitaciones para participar en varias competencias y exposiciones. Sin embargo, reconoce los desafíos económicos que conlleva asistir a estos eventos. "Salieron varias exposiciones a las que nos invitaron y estamos evaluando cuáles vamos a asistir. Por el momento, vamos a participar en una en La Rioja el 23, 24 y 25 de junio. También hay otras oportunidades, pero debemos analizar los costos. Tenemos la idea de viajar más, competir y conocer a otros artistas", aseguró.
Respecto a lo que gustaría tatuar o a sus pendientes, Herrera dijo: "Me gusta tatuar dragones, serpientes, pero es un estilo que en Catamarca no me piden mucho. Ahora incursiono en caligrafía, también la gente se está tatuando mucho la cara y creo que eso es muy zarpado", agregó con entusiasmo.
Un consejo
Cuando se le preguntó qué consejo daría a aquellos que desean iniciarse en el mundo del tatuaje, Lucho enfatiza la importancia de estudiar y comprender el proceso en su totalidad. "Yo les diría que estudien mucho, vuelvan a las raíces, empiecen desde abajo y comprendan todo el proceso. Estudien y dibujen mucho, eso les diría", aconsejó con pasión.
Lucho Herrera es un artista del tatuaje que deja su huella. Con su pasión por el tatuaje tradicional y su enfoque en la conexión con sus clientes, ha ganado reconocimiento y ha logrado crear vínculos duraderos. Con desafíos económicos pero con un espíritu incansable, sigue adelante, enfrentando nuevos proyectos y buscando oportunidades para competir y crecer como artista.
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