Catuchas

Sitios de la Memoria en Catamarca: cuáles son y los que aún quedan por señalizar

Catamarca no fue una isla durante la última dictadura militar, y estos monumentos así lo demuestran. Hay tres señalizados y muchos más por declarar como epicentros donde se cometieron delitos de lesa humanidad.
Por Lucia Acosta

Cada 24 de marzo es un buen momento para recordar que nuestra provincia no fue una isla durante la última dictadura cívico-militar.

Gracias a la lucha y visibilización de los organismos de Derechos Humanos, hoy están señalizados tres lugares donde se cometieron delitos de lesa humanidad en nuestra provincia.  

Estos lugares son memoria viva, pero tampoco son los únicos. Según activistas, hay varias locaciones que durante este año serán demarcadas como Sitio de la Memoria y contarán su propia historia.

Si no los conocías, acá hacemos un repaso.

La Casa de la Memoria

Ubicada sobre la calle 9 de Julio 1276, fue la vivienda y el sitio donde los catamarqueños Griselda del Huerto Ponce y Julio Genaro Burgos fueron secuestrados y posteriormente desaparecidos por la última dictadura cívico-militar.

En 2015 fue señalizada como “Sitio de Memoria” según la Ley 26.691, y en 2018 fue declarada Monumento Histórico Nacional.

Si bien la Casa surgió con el propósito de acompañar el proceso judicial de los juicios de lesa humanidad que se realizaron en la provincia, luego fue diversificando su tarea. Hoy realizan tareas con áreas afines para acompañamientos por violencia de género, violencia institucional, diversidad, educación e investigación y archivo.

Casa de la Memoria de Catamarca

Comisaría Seccional Primera

También conocida por ser sede de la Jefatura de Policía y la División de Investigaciones, fue señalizada en 2018 como centro de detención ilegal.

Durante la última dictadura cívico-militar, sirvió como lugar de tránsito para el plan sistemático de terror y exterminio de personas.

Según testimonios obrantes en el Archivo Nacional de la Memoria y en causas judiciales, en la División Investigaciones se mantuvieron secuestrados y torturaron a hombres y mujeres perseguidos por su militancia social, política y sindical.

Comisaría Seccional Primera, en la esquina de Tucumán y Chacabuco

Capilla del Rosario

Quizás uno de los más emblemáticos, este sitio está ubicado en el departamento Fray Mamerto Esquiú y fue protagonista de los delitos de lesa humanidad cometidos durante el gobierno democrático de Isabel Perón. Fue el primer Sitio señalizado en Catamarca, en 2014.

El 12 de agosto de 1974 en la Quebrada de los Walther fueron fusilados catorce integrantes del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP). Estos hombres formaban parte de un grupo de 50 miembros de la agrupación que intentó copar el Regimiento Aerotransportado 17.

Parte de los militantes fueron detenidos, otros se dieron a la fuga y el grupo que fue cercado en Capilla del Rosario, luego de deponer sus armas, fue ejecutado por las fuerzas del Ejército. 

Por estos crímenes, en 2013 fueron condenados a prisión perpetua tres represores:  Carlos Eduardo del Valle Carrizo Salvadores, Mario Nakagama y Jorge Exequiel Acosta.

Capilla del Rosario, en el dpto. Fray Mamerto Esquiú

Otros sitios que aguardan ser declarados

Según datos de la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia, aún quedan lugares emblemáticos donde se cometieron delitos de lesa humanidad, y cuya señalización está en trámite.

  • Esquina de Av. Güemes y Rivadavia, en la Plaza de la Estación

Allí fue secuestrado Francisco Gregorio Ponce, desde entonces desaparecido. Si bien está señalizado, aún no fue declarado Sitio de la Memoria de manera oficial.

  • Esquina de Av. Güemes y Virgen del Valle

Allí funcionó durante más de 50 años la vieja cárcel. Fue lugar de detención para presos políticos varones, y hay cientos de relatos que así lo determinan.

  • Hogar Buen Pastor, calle Maipú (entre San Martín y Chacabuco)

Allí se ubicaba el lugar de detención de mujeres presas políticas.

  • Esquina de Av. Belgrano y Tucumán

Pequeña comisaría que también funcionó como centro de detención ilegal de presos políticos.