Los profesionales se aliaron para manifestar públicamente el malestar y preocupación a la sociedad. Según afirmaron detectaron “una cantidad importante de personas que ejercen profesiones y que no están matriculadas o que no son profesionales” tanto en organismos públicos como privados. Los representantes de los distintos colegios, centros y consejos de profesionales armaron un documento que presentarán al Estado para que se arbitren los medios a la hora de controlar la situación de los profesionales que se contratan para ocupar distintos cargos.
“Hay un código de ética profesional dentro de la ley de colegiaciones donde obliga a ejercer la profesión habilitada con una matrícula profesional”, indicaron, a la vez que expusieron que “sería conveniente que tanto el sector público como el sector privado, tengan controles de la contratación”.
Si bien reconocieron que hay personas que ejercen tareas determinadas sin tener el título, la mayor parte de la preocupación deviene del hecho de que no están registrados en los colegios competentes y por ende no tienen matriculas habilitante o también se da el caso de que no la tienen actualizada por no pagar la cuota.