
Griselda Heredia, madre de Nahuel Gallo, gendarme catamarqueño detenido en Venezuela desde hace cuatro meses, rompió el silencio y compartió con angustia la pesadilla que atraviesa su familia. La mujer relató que desde la detención de su hijo no recibieron ningún tipo de comunicación, ni de parte de las autoridades venezolanas ni de los representantes argentinos. "Venezuela lo tragó, y no sabemos más nada. Nos da miedo hasta ir a buscarlo", expresó Heredia.
El caso de Gallo generó conmoción no solo en Catamarca, sino a nivel nacional. Según relató su madre, a pesar de los esfuerzos realizados por diversas instituciones y funcionarios, no hubo avances concretos. “Hablamos con el Presidente, con Patricia Bullrich, con el Canciller Argentino, y el Gobernador nos dijo que la situación está muy complicada, que debemos esperar una negociación con el gobierno de Maduro, pero nada más”, explicó Griselda.
El temor de la familia de Gallo crece cada día. La opción de viajar a Venezuela para buscar respuestas está descartada, no solo por el alto costo económico, sino también por el peligro que implica. "Maduro ha advertido que todo aquel que entre a Venezuela será detenido. Estamos atrapados, no sabemos a dónde más acudir", indicó Heredia. Además, señaló que la familia de su hijo en Venezuela también se encuentra en una situación de desesperación, sin noticias de su paradero.
En su relato, Griselda Heredia denunció la falta de apoyo por parte de figuras políticas clave, como la senadora Lucía Corpacci, a quien contactó en varias ocasiones sin obtener respuestas. “Llamé tres veces y nunca me atendieron. Dejé mensajes, pero nunca contestaron”, lamentó.
La madre también criticó el papel de algunos dirigentes sociales que, según ella, “usaron” su dolor para fines políticos sin ofrecer una ayuda real. Ante la indiferencia de las autoridades y la falta de respuesta, Griselda concluyó con una desesperada apelación: "No sabemos qué más hacer. Solo pedimos que nos devuelvan a nuestro hijo".