Aerolíneas Argentinas cerró el conflicto con los gremios aeronáuticos tras semanas de negociaciones con importantes avances que mejorarán la productividad de la compañía y ajustarán ciertos beneficios que estaban por fuera de los estándares de la industria.
El acuerdo fue firmado por los representantes de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), la Asociación Personal Técnico Aeronáutico (APTA) y la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA).
A través de un comunicado, Aerolíneas Argentinas informó que el acuerdo incluyó una oferta salarial del 16% y una serie de modificaciones que apuntan a aumentar la flexibilidad laboral y mejorar la eficiencia operativa de la aerolínea. Entre los cambios más relevantes se destaca la eliminación de algunos beneficios históricos que afectaban la productividad, como los traslados gratis en remises para el personal, el asiento de descanso en clase ejecutiva en vuelos largos y los pasajes vacacionales gratuitos para familiares de pilotos y pilotos jubilados.
También se acordó que el horario de trabajo de los empleados comenzará cuando lleguen a las terminales aeroportuarias y no cuando inicien su traslado en remis. Además, el gremio de pilotos levantó restricciones que dificultaban la programación de vuelos, lo que se espera aumente las horas de vuelo mensuales entre un 3% y 5%, lo que significará una mayor productividad. En cuanto a la flexibilidad de tareas, se acordó que mecánicos y personal de rampa podrán ser trasladados entre hangares y líneas de trabajo según las necesidades operativas, mientras que el personal de check-in levantó su bloqueo sobre los sistemas de autoservicio y el despacho automático de equipaje.
Estos cambios también incluyeron incentivos salariales ligados al aumento de horas de vuelo para pilotos y tripulantes, quienes podrán percibir mayores ingresos cuanto más tiempo pasen en el aire. Aerolíneas Argentinas destacó que estos acuerdos permitirán una mayor eficiencia en la operación y que las modificaciones son fundamentales para garantizar la estabilidad de la programación durante la temporada de verano.
A nivel financiero, la aerolínea señaló que las reformas han contribuido a reducir su déficit en más del 75% respecto al año pasado, cuando las pérdidas fueron de 390 millones de dólares. La compañía reafirmó su compromiso con la modernización y con una estructura productiva más cercana a los estándares internacionales de la industria aerocomercial, con el objetivo de mejorar la competitividad y la rentabilidad de la aerolínea.
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