El pasado 18 de mayo, Víctor Gabriel Castro fue condenado a tres años de prisión en suspenso por los delitos de "amenazas agravadas por el uso de arma" y "lesiones graves". La sentencia fue dictada luego de un proceso judicial que tuvo lugar tras el ataque ocurrido el 4 de septiembre de 2021, en el cual la víctima sufrió graves heridas en la mano derecha al resistirse a los avances de Castro.
Castro, quien trabajaba en el Hospital San Juan Bautista, presentó un recurso de casación ante la Corte de Justicia en busca de revertir la condena. Su defensa argumenta que la sentencia no consideró adecuadamente ciertas circunstancias del caso y busca que la Corte revise la decisión del tribunal inferior.
La querella, por su parte, sostuvo durante el proceso que la pena impuesta es insuficiente dada la gravedad de los hechos. La víctima sufrió lesiones significativas y duraderas, y el uso de un arma en el ataque agrava la situación, según argumentaron los abogados de la acusación. La querella había solicitado una pena más severa para Castro, en línea con la gravedad de los delitos cometidos.
Ahora, la Sala Penal de la Corte de Justicia deberá analizar el recurso presentado por Castro y determinar si procede revisar la sentencia. Este proceso puede implicar una reevaluación de las pruebas y testimonios presentados durante el juicio inicial, así como una reconsideración de los argumentos legales utilizados para dictar la condena.