La audiencia de conciliación entre el gremio y los representantes de la empresa Textilcom finalizó sin acuerdo, aumentando la incertidumbre entre los trabajadores. La patronal ofreció pagar los haberes de abril en el mes de julio, una propuesta que fue rechazada de inmediato por el Sindicato Obrero de la Industria del Vestido y Afines (SOIVA).
Raúl Rivero, secretario general del SOIVA, manifestó su preocupación por la gravísima situación que atraviesan los trabajadores cesanteados. "No podemos esperar hasta julio. Los trabajadores necesitan esos haberes ahora", afirmó Rivero.
Durante la audiencia, los representantes de Textilcom argumentaron dificultades financieras para justificar la postergación del pago. Sin embargo, esta explicación no convenció al gremio, que considera imperioso percibir lo adeudado a la brevedad para paliar la crisis que enfrentan los trabajadores.
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