El ministro de Economía, Luis Caputo, y el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, recibirán este lunes a la misión del Fondo Monetario Internacional (FMI). El objetivo es reanudar la continuidad del acuerdo vigente con el organismo, a través del pedido de un perdón y con los giros de desembolsos preestablecidos, o bien reformularlo, según comunicó la agencia Télam.
Las reuniones formales con el Fondo empezaron el viernes con los técnicos del gobierno de Javier Milei, para dar comienzo a la revisión del acuerdo vigente, que está "virtualmente caído" y cuyos desembolsos previstos se encuentran frenados desde noviembre de 2023.
Días antes del cambio de Gobierno, la directora de Comunicaciones del FMI, Julie Kozack, remarcó la necesidad de "un plan de estabilización fuerte, creíble y apoyado políticamente para encarar de forma duradera los desbalances macroeconómicos y los desafíos estructurales de Argentina, y a la vez protegiendo a los más vulnerables".
A la par del apoyo político, también se espera que el FMI se reúna con representantes de la oposición, de los trabajadores, del sector empresario y con analistas del mercado.
"Desde hace unos meses que los académicos que trabajan en el FMI en conversaciones con el mercado instalaban la necesidad de que Argentina haga otra reestructuración con un haircut al estilo Grecia e Irlanda para que la deuda sea sustentable", dijo el economista Héctor Timerman, teniendo en cuenta la situación de los títulos públicos locales a finales de la gestión anterior.
"Creo que con el sendero fiscal que propone este Gobierno esas voces fueron silenciadas y eso es muy positivo para la recuperación de la Argentina", comentó Timerman al respecto, y dio pistas sobre un cambio reciente en la visión del FMI respecto de los últimos pasos que dio el gobierno de Milei, en comparación con la gestión anterior.
El grupo financiero Adcap agregó que "para Estados Unidos, principal accionista del Fondo, la viabilidad política de cualquier acuerdo es tan importante como sus metas económicas. El Gobierno debe incluir a la oposición en el diálogo".
Mientras se definen los nuevos acuerdos, en enero vencen unos US$1.900 millones con el Fondo. Milei utilizaría el usualmente empleado recurso de pagar hacia fin de mes, hasta se destraben los desembolsos del acuerdo vigente.
Voceros del FMI señalaron el martes pasado que el objetivo del equipo técnico será "continuar las negociaciones sobre la séptima revisión del programa apoyado por el FMI".
"Nuestro objetivo sigue siendo apoyar los esfuerzos en curso para restablecer la estabilidad macroeconómica en beneficio de Argentina y su gente", agregaron las fuentes.
En rigor, los vencimientos con el Fondo para 2024 totalizan a valor de hoy cerca de unos US$7.700 millones, y arrancan el próximo 9 de enero, donde habrá que pagar unos US$1.300 millones, y el próximo 16 de este mes por US$650 millones.
En este contexto, el Gobierno autorizó la emisión de Letras del Banco Central por US$3.200 millones a diez años de plazo, ante "la proximidad de los vencimientos de los compromisos de deuda". Medida dispuesta a través del Decreto de Necesidad y Urgencia 23/202, publicado en el Boletín Oficial, "con el fin de garantizar la continuidad del normal funcionamiento del Estado nacional", se indicó en sus considerandos.
En ese sentido, agregó: "desde el 10 de diciembre estamos transitando un plan para estabilizar este horror que nos han dejado en la situación económica en la República Argentina", señaló el vocero presidencial, Adorni.
Según Sebastian Maril, economista de Latam Advisors, "Argentina tiene que hacer desembolsos a principios de mes por US$2.000 millones y quizás haya un perdón de ese monto a pagar", consideró en declaraciones en la misma línea que planteó el Banco Central argentino, días atrás, respecto del resultado de las negociaciones con el FMI. No obstante, agregó que "ahorrar el dinero que no tenemos no alcanza y el único organismo que nos está prestando plata es el Fondo; el acuerdo tiene que venir acompañado con una seguridad de que las propuestas de Milei satisfacen las condiciones del FMI. Hoy, no está claro porque el DNU y el proyecto están dando vueltas en el Congreso", cerró.
En este contexto, el economista Pablo Nemiña, investigador en economía política del Conicet y profesor de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), consideró que "sería un mal antecedente para la Argentina y el FMI elaborar un programa cuyas medidas centrales descansen en decisiones unilaterales del Ejecutivo, sin considerar el diálogo democrático con el resto de las fuerzas sociales", opinó.
“Emergencia pública en materia económica”
En paralelo, el Gobierno avanzó con la publicación del DNU 70/2023 de desregulación económica, que fue enviado al Congreso como parte de un proyecto de "Ley ómnibus" junto con un paquete de medidas adicionales complementarias.
Este DNU, que empezó a regir el 29 de diciembre de 2023, declara "la emergencia pública en materia económica, financiera, fiscal, administrativa, previsional, tarifaria, sanitaria y social hasta el 31 de diciembre de 2025″. A la par, establece una profunda reforma del Estado en distintas áreas.
Hasta ahora cuenta con una medida cautelar de la justicia, que dio un lugar a las asociaciones de los trabajadores, y que frena su aplicación plena, precisamente en el plano de la reforma laboral.