La fiscal de feria, Gabriela De Marcos, emitió una orden para habilitar la feria judicial con el propósito de realizar una ampliación crucial de la pericia médica a Mónica Murúa. Esta mujer está imputada por el crimen de Miguel Ángel Ferreyra, pero actualmente se encuentra en prisión domiciliaria debido a problemas de salud.
La solicitud para esta nueva evaluación médica fue presentada por el abogado de Ángela Isabel Herrera, la madre de la víctima asesinado el 10 de septiembre en El Bañado, departamento Valle Viejo.
El fiscal original de la causa, Laureano Palacios, había concedido la prisión domiciliaria a Murúa a finales de septiembre, basándose en informes médicos que indicaban un cuadro de hipertensión.
Sin embargo, esto generó controversia y reclamos por parte de los familiares de la víctima, quienes presentaron solicitudes judiciales para realizar nuevas pericias médicas. Un informe de noviembre sugirió que la mujer podía permanecer en un centro de detención con controles diarios.
Ante la demora en los resultados de los nuevos estudios en el Hospital San Juan Bautista, la madre de la víctima insistió en habilitar la feria judicial para la ampliación de la junta médica, originalmente programada para el 1 de febrero cuando se reanudara la actividad judicial.
La fiscal De Marcos respondió positivamente a esta solicitud y ordenó al Cuerpo Interdisciplinario Forense (CIF) fijar una fecha para la junta médica.
Caso en Investigación
El 10 de septiembre, Miguel Ángel Ferreyra perdió la vida tras recibir una puñalada en el pecho en el barrio 140 viviendas, ubicado en el departamento Valle Viejo. Mónica Murúa y su hijo, Jorge Castro, enfrentan acusaciones por este homicidio.
El fiscal Palacios ha imputado a Castro por "homicidio simple en calidad de autor" y a Murúa por "homicidio simple en calidad de partícipe secundaria". Ambos permanecen detenidos con prisión preventiva, siendo Castro recluido en el Servicio Penitenciario Provincial (SPP) de Miraflores, en el departamento Capayán.
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