No se tapa el sol con las manos: Catamarca tiene el mayor índice de suicidios y un sistema público de turnos que no da abasto
Según el Colegio de Profesionales de la Psicología de Catamarca, hay solo 350 psicólogos en actividad para 430.000 habitantes. Del otro lado, un "turnero" público que no da respuesta.
Las cifras son angustiantes y desde el Estado no parecen acusar recibo de la urgencia. El suicidio constituye la segunda causa de muerte entre la franja etaria de 10 a 19 años, según UNICEF Argentina, y la cuarta entre los jóvenes de 15 a 29 años, según el Ministerio de Salud. Sin embargo, no es un problema que aqueja solamente a los adolescentes: la OMS indica que 1 de cada 100 muertes es por suicidio.
¿Qué recursos tiene un ciudadano que necesite acudir a un profesional de psicología en la salud pública?
El Servicio de Salud Mental del Hospital Interzonal San Juan Bautista (HSJB) se conforma por el Servicio de Psiquiatría y el Servicio de Psicología. Este último, a su vez, posee atención de guardia y de consultorios externos.
Hay un número de Whatsapp al cual solicitar turnos, y es la única vía de acceso al servicio. Por este número ingresan los pedidos de la Capital para conseguir un turno que parece nunca llegar. Jamás se obtuvo respuesta durante las 4 ocasiones que esta Redacción se comunicó a la espera de un turno para una cita de atención psicológica. El número 3834 242266 recibe no solo los pedidos de cita para Psicología, sino que también recepciona las demandas de todas las especialidades.
En el área de Salud Mental del HSJB, la sala de emergencias y los turnos programados de Psicología son atendidos por las mismas 10 profesionales, lo que lleva a la conclusión lógica: un equipo saturado por las guardias de 20 horas y la rotación ante las múltiples demandas.
Otra de las tareas abocadas a este grupo de psicólogas es la respuesta a los oficios que llegan de diferentes instituciones durante todos los días, aproximadamente 5 por jornada.
A pesar de las buenas intenciones del personal, las manos no abarcan y los horas son escasas para dar solución a la demanda, a lo que se le suma los problemas históricos que aquejan a la salud pública: condiciones edilicias deplorables, trabajadores fuera de convenio, pésima retribución salarial.
¿Qué tan preparada está Catamarca para afrontar la demanda actual de salud mental?
Acá van algunos datos a tener en cuenta: según el último censo, Catamarca tiene 429.556 habitantes. Sin embargo, a la fecha hay tan sólo 495 psicólogos, de los cuales 350 se encuentran en atención de consultorio, en su mayoría son mujeres. Esto equivale aproximadamente a 1 psicólogo cada 1.230 catamarqueños.
De estos 350 profesionales en plena actividad, muchos decidieron volcarse a la atención privada.
Para entender parte del contexto económico y social, Catamarca se encuentra entre las 5 provincias con mayor cantidad de empleados estatales. OSEP es la obra social obligatoria de estos, por lo tanto, es la más usada en todo el territorio provincial.
Desde el Colegio de Psicólogos explicaron que si bien hay buena voluntad por parte del Gobierno, existen dos problemas a resolver entorno a la devolución de las prestaciones de los profesionales.
Por un lado, los y las psicólogas de Catamarca perciben el pago de lo trabajado casi 3 meses después de rendir las ordenes correspondientes. Por otra parte, la Obra Social de los Empleados Públicos implementó durante el último año un sistema de TOKEN que muchas veces complica el trámite, en vez de agilizarlo.
Y los pocos profesionales que están disponibles, al tener tantas trabas para cobrar sus honorarios por OSEP, prefieren trabajar de forma particular: una consulta psicológica ronda actualmente entre $5.000 y $7.000 la sesión. Un privilegio que pocos pueden darse.
Este panorama genera que cada vez sean menos los profesionales de Salud Mental dispuestos para atender una demanda cada vez más creciente. Si se tiene en cuenta que el suicidio es la punta del iceberg, hay diagnósticos que no están llegando a ser atendidos por falta de personal.
El Ministerio de Salud de Argentina publicó en su último informe epidemiológico las cifras sobre la cantidad de suicidios que ocurrieron entre 2010 y 2019. Lo que sorprendió fueron las estadísticas, ya que se determinó que en el país 1 persona se quita la vida cada 3 horas.
Según un informe de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el 79% de los suicidios en América ocurre entre hombres, pero aclara que el suicidio entre las mujeres también ha aumentado. En 2019 se registraron más de 97.000 suicidios en el continente.
El estudio revela, además, que la tasa promedio de suicidio entre los hombres de la región disminuyó a medida que creció el gasto en salud per cápita, mientras que la de las mujeres se redujo en consonancia con el aumento del número de médicos por cada 10.000 habitantes. Las cifras también evidenciaron la urgencia de apoyar a las personas que habitan en zonas rurales aisladas.
La pérdida de empleo o económica, los traumas o abusos, los trastornos mentales y las barreras de acceso a la atención de salud son algunas de las condiciones que pueden llevar a las personas a pensar en quitarse la vida, y la pandemia hundió a mucha gente hacia esas situaciones.
La OPS afirmó que los impactos económicos, sociales y emocionales generados por la pandemia de COVID-19 han exacerbado los factores de riesgo asociados a las conductas suicidas y llamó a hacer de su prevención una prioridad en las agendas de salud pública.
Ayuda
En Argentina, la ley sancionada en 2015 y reglamentada en 2020 es la llamada Ley Nacional de Prevención del Suicidio Nº 27.130. Está orientada a disminuir la prevalencia del suicidio a través de la asistencia y la prevención.
Allí se declaraba de interés nacional “la atención biopsicosocial, la investigación científica y epidemiológica, la capacitación profesional en la detección y atención de las personas en riesgo de suicidio y la asistencia a las familias de víctimas del suicidio”.
Para más información, podés ingresar al apartado de "Prevención del suicidio" presente en argentina.gob.ar o llamar al Centro de Asistencia al Suicida: (011) 5275-1135.
