Los gobernadores del peronismo y fuerzas aliadas repudiaron la violenta represión ocurrida en Jujuy contra manifestantes que protestaban contra la reforma constitucional de ese distrito, aprobada por una Asamblea Constituyente en un breve sesión celebrada en la Legislatura local, y consideraron que "la democracia se construye sin violencia".
El primer mandatario catamarqueño, Raúl Jalil, formó parte de este repudio compartiendo un mensaje a través de sus redes sociales.
"Las y los gobernadores de la Liga ratificamos, una vez más, la imperiosa necesidad de encontrar una síntesis en la fórmula presidencial que represente a Unión Por La Patria ante lo que ya dejó de ser una amenaza: el agrupamiento de la derecha argentina defendiendo la violencia. No sólo ratifican el camino del ajuste, sino que prometen garantizarlo con cárcel o balas", sentencia el comunicado.
En otro tramo, señala: "En defensa de la Soberanía Política, la Independencia Económica y la Justicia Social, instamos a la dirigencia del Movimiento Nacional y Popular a dejar de lado apetencias individuales y presentarle a la Argentina toda una unidad representativa de todos los sectores para seguir gobernando la Argentina".
Qué pasó en Jujuy
El martes, una violenta represión policial que se extendió en Jujuy por más de cuatro horas sobre manifestantes que protestaban contra la reforma de la Constitución provincial dejó un saldo de 170 heridos y al menos 68 detenidos.
En una sesión ordinaria llevada a cabo el martes en Jujuy, los convencionales constituyentes que responden al gobernador de Juntos por el Cambio Gerardo Morales aprobaron la reforma parcial de la Constitución de ese distrito, que prohíbe los cortes de calles y de rutas.
Eso generó que docentes, pueblos indígenas, trabajadores estatales, organizaciones sociales y sindicales avanzaran por las calles de San Salvador de Jujuy con un "banderazo", portando banderas argentinas, repudiando la reforma aprobada.
Las protestas en la provincia se replican con al menos 20 cortes de ruta en las localidades de La Quiaca, Abra Pampa, Humahuaca, Tilcara, Libertador San Martín, Susques, Caimancito, San Pedro, Fraile Pintado, y Purmamarca.
Durante más de cuatro horas, efectivos de infantería de la policía jujeña se enfrentaron con los manifestantes, arrojando balas de goma y gases lacrimógenos, respondiendo al lanzamiento de piedras, en un clima de tensión en las calles.
Durante los incidentes la policía arrojó capsulas de gas lacrimógeno, piedras con hondas y balas de goma, lo que provocó una gran cantidad de heridos integrantes de distintos sectores.