En una de las indagatorias programadas para esta semana, el técnico Gustavo Chazarreta prestó declaración sobre los montos que manejaba la financiera de Edgar Adhemar Bacchiani.
El testigo, propuesto por uno de los querellantes de los damnificados, era quien se encargaba del soporte informático de la firma y en su indagatoria detalló los movimientos financieros de Adhemar Capital, la cual contaba con 8035 clientes.
¿Qué se sabe hasta el momento?
La firma siguió recibiendo contratos nuevos de inversionistas en los meses de marzo y abril, según los datos cargados en el sistema informático, pero se desconoce cuál es la cantidad exacta de acreedores que no pudieron acceder a una reestructuración del capital invertido.
Las inversiones hechas en Adhemar oscilaban entre pesos, criptomonedas, como Bitcoin o Ethereum, y dólares. Solamente en dólares, la empresa de Bacchiani habría recibido más de 224 millones en fondos aproximadamente y con intereses, los 224 millones ascenderían a 393 millones de dólares.
En cuanto a la moneda oficial, y con el valor agregado de los intereses, el capital invertido estimativo sería de 73 mil millones de pesos. Las criptomonedas, por su parte, manejan un distinto tipo de convertibilidad debido a su verdadero valor y su estabilidad en el tiempo.
Durante la declaración, Chazarreta indicó que su última actualización realizada en el sistema informático fue en marzo, pero logró visualizar nuevos montos ingresados en abril, a pocos días de la detención de Bacchiani.
Adhemar Capital continuaba receptando dinero, a pesar de la medida judicial impuesta que prohibía recibir más capital cuando la empresa entró en cesación de pagos. Algunas de las inversiones que habrían sido realizadas fuera de la orden judicial pertenecerían a Pablo Olmi, por 92.100 dólares.
Por su lado, ayer el "trader" se abstuvo de declarar en su propia indagatoria, en la cual fue acompañado por el exfiscal Ezequiel Walther.
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