En lo formal, los radicales votarán hoy para renovar las autoridades partidarias, con mayor énfasis en la conducción del Comité Provincia. Pero esta elección interna, a diferencia de otras, tendrá un valor extra clave: el sector ganador obtendrá la legitimidad necesaria para definir la oferta electoral opositora en la disputa por el poder político de Catamarca en octubre. Nada menos.
Hoy la UCR está presidida por el diputado nacional Francisco Monti, quien completó el mandato de la exdiputada provincial Marita Colombo, fallecida en mayo de 2021 en el tramo más trágico de la ola de Covid-19. Monti también era entonces diputado provincial y había quedado como vicepresidente del partido tras la interna anterior, en la que nuevos sectores, como en su caso el FAPRA, habían empezado a ganar espacios en un esquema históricamente dominado por la línea Celeste fundada por el exgobernador Oscar Castillo.
El “mandato” de Monti estuvo jalonado básicamente por dos momentos políticos disímiles. En lo sectorial y personal, en 2021 logró consolidar su crecimiento al vencer en las PASO legislativas, en alianza con la novel línea “Raúl Alfonsín” del entonces rector de la UNCA Flavio Fama, a la propuesta castillista del intendente de Belén, Daniel Ríos, y la exdecana de Humanidades Patricia Breppe. Fue allí donde Monti y Fama fueron electos diputado y senador nacional respectivamente.
Sin embargo, la mudanza al Congreso nacional le significó a Monti, como era lógico, dejar a la UCR catamarqueña en segundo plano. Y no tardaron en llegar los cuestionamientos de los opositores internos por el hecho de haber “cerrado” el partido al debate sobre la realidad política provincial y nacional. Poco y nada pudo alegar al respecto.
Con los dos principales referentes del oficialismo radical instalados en Buenos Aires, el Comité provincial se convirtió prácticamente en una sede vacía, sin vida política. Allí Monti y Fama se percataron de su soledad. No habían formado nueva dirigencia. Nadie más que ellos podía hablar con autoridad de su espacio interno.
En ese contexto, empezaron a cobrar más protagonismo los dirigentes opositores locales. Gente con ansias de poder y trayectoria política y legislativa provincial. Ambas facciones se enfrentarán este domingo
Dos listas, una boleta
Pese a los esfuerzos por armar una lista de unidad, las negociaciones no prosperaron y las 13 líneas internas se agruparon en torno a los dos grupos con mayor envergadura política.
- El oficialismo partidario conformó la Lista N°3 “Renovación y Cambio Radical”. Cuenta con el apoyo de las líneas FAPRA, Raúl Alfonsín, Radicales en Acción y CPR, entre las principales.
Lleva como candidata a presidente del Comité Provincia a la diputada Natalia Herrera, y al concejal Fernando Navarro para el Comité Capital.
- La oposición va con la Lista N°5 “Ahora, el radicalismo”. Aglutina 8 líneas internas, entre ellas Celeste, Evolución Radical, Movimiento Renovador, Morada, La Causa Argentina y Radicalismo Territorial, entre otras.
Propone como presidente del Comité Provincia al diputado Alfredo Marchioli y al frente del Comité Capital a la diputada Juana Fernández (reelección)
El padrón de la UCR cuenta con unos 46.000 afiliados. De acuerdo con la Carta Orgánica, el mínimo exigido de participación para que la elección sea declarada válida es el 15%, es decir, poco menos de 7.000 afiliados. Todos descuentan que entre ambas listas podrán superar el piso sin problemas.
La novedad de esta interna es que los radicales votarán una boleta única. En ella están ambas listas con sus respectivos candidatos y un casillero para marcar al lado de cada categoría. Por supuesto, está la opción de marcar la lista completa.
Unos y otros
La conformación final de las listas de candidatos habla tanto por las presencias como por las ausencias.
Por el lado del oficialismo, llamó la atención que Monti no solo no se presente como candidato a presidente -ya que en definitiva antes fue elegido como vice-, sino que tampoco figure en ningún lugar de la lista. Y se trata del principal referente político del sector y, quizás, de la oposición provincial.
Fama, en cambio, va como candidato a delegado a la UCR nacional, cuando se esperaba que tuviera un rol más activo en el orden provincial.
Herrera, por su lado, representa a la línea Radicales en Acción, un desprendimiento del Movimiento Renovador fundado por el extinto Eduardo Brizuela del Moral, de quien ella es sobrina.
En cuanto a “Ahora, el radicalismo”, Marchioli encarna en los hechos a uno de sus dirigentes más activos, no solo por su trabajo partidario sino también como diputado. Y es el único que ha planteado públicamente su principal aspiración: ser gobernador de la provincia por Juntos por el Cambio. Esto es, tiene ambiciones de poder y las exterioriza.
El concejal Luis Fadel, quien va como candidato a vice 1° del Comité Provincia por la misma lista, es el representante más encumbrado de la línea Celeste y uno de los opositores internos que más reclamó por la inactividad de la UCR en los dos últimos años.
El resultado de las urnas radicales que se conocerá esta noche tendrá una primera interpretación puertas adentro: si gana “Renovación y Cambio Radical”, la legitimación política será más para Fama que para Monti, por el simple hecho de poner su nombre en la boleta. Para Natalia Herrera será el cargo.
En cambio, si el triunfo es de la lista encabezada por Marchioli, el mensaje será que el radicalismo ha castigado a sus principales referentes, los legisladores nacionales.
Pero la interpretación más relevante es que esta interna consolidará un liderazgo político o creará uno nuevo. Y el radicalismo, como eje vertebrador de Juntos por el Cambio, será el que manejará la oferta electoral de la principal fuerza opositora.
En otras palabras, hoy sería posible conocer al candidato a gobernador que enfrentará a Raúl Jalil, Gustavo Saadi o Lucía Corpacci. Una suerte de revelación anticipada.