En el video se pueden las líneas de producción alumbradas tenuemente. Trabajadores recostados sobre sus puestos de trabajos, carpas improvisadas, algunos durmiendo sobre mantas y cartones para resguardarse del frío, tristeza en los rostros, incertidumbre en el aire. Las imágenes hablan por sí solas.
El lugar donde diariamente y desde hace dos años se realizaban prendas para primeras marcas como Cheeky, Mimo & co., Grissino, Cristóbal Colón y Topper, se convirtió en una tienda de campaña, en un refugio para trabajadores que representan más de 120 familias que luchan por su fuente de ingreso.
El video llegó hasta INFORAMA compartido por los propios trabajadores, en él se puede observar las condiciones en las que un gran número de trabajadores pasaron la noche. El testimonio que brindan las imágenes es crudo.