Los trabajadores del municipio de Bañado de Ovanta arrancaron la semana con protestas frente a la ex hostería Municipal, sede donde funciona momentáneamente la intendencia y otras áreas. La quema de neumáticos se trasladó justamente a la puerta del edificio.
Los manifestantes le reclaman al jefe comunal Mario Páez una recomposición salarial.
Por otro lado, piden por el despido de 2 empleados que dependían del municipio.