Muy cercana a la capital catamarqueña, situada en la sierra del Colorado, la Quebrada de San Lorenzo es un valle de ensueño donde fluye un arroyo de aguas cristalinas del mismo nombre. Este arroyo es fuente de agua para consumo y riego en la localidad de La Aguada, que se encuentra en la base del Valle Central.
Aunque en gran parte del año el cauce no trae agua en superficie a la altura de La Aguada, al adentrarse en la quebrada, el arroyo suele tener crecidas bravas debido a su importancia en la cuenca. Las marcas que deja el agua en las rocas son una prueba de ello. Siguiendo el curso del arroyo aguas abajo, se llega a la zona del Predio Ferial.
Flora y fauna
La flora de la quebrada es igualmente sorprendente. Además de los grandes mistoles, algarrobos y palos borrachos típicos de la ecorregión del chaco serrano, otras especies que crecen en climas más húmedos se hacen presentes formando un bosque en galería en el fondo de la quebrada. Molle de beber, guarán colorado, lecherón, y muchas más especies, encuentran aquí un hogar ideal gracias a la gran disponibilidad de agua del arroyo.
En cuanto a la fauna, la Quebrada de San Lorenzo es un paraíso para los amantes de las aves. Además, se pueden observar lagartijas, de distintas clases, que no superan los 20 cm, aunque a veces pueden encontrarse ejemplares de mayor tamaño. Las llamadas “chelcos” son una de las especies más comunes de lagartijas en la quebrada.
¿Cómo llegar?
Si quieres descubrir la belleza de la Quebrada de San Lorenzo, solo debes dirigirte hacia el norte de la rotonda, en vez de tomar el camino hacia la Gruta Virgen del Valle. Accederás por la vieja RP 108 (ex camino a El Rodeo) y en 2,5 km llegarás a La Aguada. Desde allí, siguiendo el lecho del arroyo San Lorenzo aguas arriba, encontrarás increíbles remansos, ruidosas cascadas e inmensas rocas después de solo 3 km de avance por la quebrada.