Por Redacción Inforama

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2 de enero de 2024

Llega el verano y con él, la necesidad inmediata de refrescarnos. Por lo que armar una pile está entre los planes preferidos de las familias. Sin embargo el agua utilizada para llenarla es potable y podría en su caso, satisfacer las necesidades de hidratación e higiene de una persona durante toda una semana.

 Por esta razón, es conveniente aprender a utilizar el recurso y tener en cuenta una serie de recomendaciones al momento de armar la pileta:

• Verificación del terreno: verifica que el espacio donde colocarás la pileta esté nivelado y libre de objetos punzantes que puedan dañar su base. Colocarla sobre una superficie impermeable, como una lona o una plancha de goma espuma, la protegerá de pinchaduras.
• Uso de cobertor cuando no esté en uso: un cobertor ayuda a mantener la pileta limpia de hojas, polvo, insectos y otros elementos que podrían caer al agua. Además, los cobertores oscuros permiten conservar la temperatura al bloquear los rayos del sol.
• Eliminación de elementos de la superficie: utiliza un bichero o una red para retirar hojas y mantener la superficie de la pileta limpia de partículas no deseadas.
• Limpieza del fondo: es recomendable colocar un decantador la noche anterior para que todas las partículas se acumulen en el fondo de la pileta, facilitando su eliminación con un barrefondo.
• Control del PH: verifica semanalmente el nivel de PH del agua, asegurándote de que esté entre 7,2 y 7,6. Contar con un kit de piscinas te permitirá monitorear las condiciones de tu pileta.
• Aprovechamiento de las ventajas de la química: existen productos específicos para este tipo de piletas que contienen alguicida, bactericida, cloro y decantador en combinaciones y cantidades apropiadas para su cuidado.
• Uso de pastillas: coloca una boya con pastillas de cloro o triple acción para mantener el agua limpia y desinfectada. Una pastilla acondiciona 5.000 litros de agua hasta su disolución total. La cantidad de pastillas y el tamaño de la boya dependerán de las dimensiones de tu pileta.
• Limpieza de los pies: en verano, es común andar descalzos, acumulando suciedad en los pies. Enjuágalos fuera de la pileta antes de ingresar para evitar trasladar esas partículas al agua.
• Filtración del agua: si tu pileta cuenta con un filtro, recuerda mantenerlo en condiciones y hacerlo funcionar un par de horas al día.