La renuncia de Guillermo Ferraro, quien estuvo un mes y medio al frente del Ministerio de Infraestructura de la nación, dejó en jaque al sector de transporte público de pasajeros que estaban a la espera de la resolución de inquietudes laborales.
“No tenemos con quien dialogar y la Secretaría de Transporte no cuenta con funcionarios para resolver nuestros reclamos”, dice un comunicado firmado por Roberto Carlos Fernández, presidente del Consejo Directivo Nacional de la Unión Tranviarios Automotor.
“Sabemos que el Ministerio de Economía se estaría haciendo cargo de la Secretaría de Transporte, pero hasta tanto no suceda, nosotros no podemos llevar nuestros salarios a nuestros hogares que necesitan de él para su sostén”, indicaron desde la UTA.
Ferraro renunció en medio de una polémica, y es la primera baja ministerial del gobierno de Javier Milei. Según se supo, el exministro habría filtrado que el Presidente en una reunión de Gabinete habría dicho que a los gobernadores “los iba a fundir”, en caso de no recibir el apoyo de los diputados en el Congreso para aprobar la “ley ómnibus”. El ministro Luis Caputo tomo posesión del área que quedó vacante.
El alejamiento de Ferraro se dio en medio de la negociación paritaria con la UTA y de acuerdo al comunicado la Secretaría de Trabajo “está impedida de resolver la cuestión”, por lo que no están recibiendo solución a los pedidos.
Ante lo expuesto, la UTA afirmó que está en “estado de alerta que indefectiblemente nos conducirá a medidas de fuerza que es la herramienta que tenemos para defender nuestros salarios”.
