Aterrada, sola y angustiada, MarÃa Gómez habló desde su casa en Venezuela en plena búsqueda de su marido, que fue detenido por las autoridades del paÃs caribeño. En diálogo con TN aseguró que las imágenes que se difundieron de Nahuel Gallo no le dan ninguna certeza de que se encuentre en buen estado de salud y describió el dramático momento que afronta solo acompañada por su mamá y su pequeño hijo.
"El de las imágenes no es él, no es Nahuel. No es el que estamos acostumbrados a ver, está frustrado, cabizbajo, pero más allá de las imágenes el llamado sigue siendo el mismo, que deje de estar pasando esto porque no se lo merece", afirmó.
A su vez explicó que junto a su madre contrataron abogados en San Cristóbal, que se puso una denuncia por desaparición pero fue desestimada por las autoridades judiciales: "No avanzó, eso le dijeron a los abogados. Hubo personas intimidadas que no podÃa dar información porque sino los despedÃan".
Mientras ella cuida a su pequeño bebé, su madre recorre ciudades enteras esperando por algún dato sobre Nahuel: "Mi mamá estuvo en San Antonio, en San Cristóbal, también en Caracas, pero seguimos sin información y por eso la angustia se intensifica. Yo desde hace unas semanas inicié el pedido de fe de vida de Nahuel y esas imágenes no lo son".
Y volvió a referirse al video difundido por el gobierno venezolano en el que se ve a Gallo en un centro de detención: "Ahà el Nahuel que está, es un Nahuel que está haciendo lo que no quiere hacer. Los que lo conocemos sabemos que no lo hace por voluntad propia, no es una fe de vida. ¿Cuándo fueron tomadas las fotografÃas? Y lo que más me inquieta es cómo se difundieron las imágenes: por la televisión, no vino nadie de la Justicia a mostrarnos esto".
Respecto a la detención de su esposo, manifestó: "Es algo inhumano, es un acto de muchÃsima maldad, nadie se responsabiliza por cómo y en qué circunstancias se tomaron esas fotografÃas. Todos los dÃas tengo miedo de que le hagan algo, todos sabemos lo que esta gente es capaz de hacer. Me dicen que me calle pero si yo no digo la verdad, ¿quién lo hace? Tengo un bebé muy chiquito que depende de mà y tengo los nervios y una angustia".
Además, expresó que por el temor que tienen los ciudadanos de aquel paÃs, ya nadie se acerca para acompañarlas: "Estamos solas, nadie se acerca, nadie se quiere meter, somos dos mujeres con un bebé. Nadie te pregunta, me dicen 'cuÃdate', pero nadie te cuida. Es muy difÃcil e injusto lo que estamos viviendo hasta el dÃa de hoy".
MarÃa manifestó que no piensa dejar el paÃs hasta que su marido aparezca: "No es justo para Nahuel que yo me vaya, yo acá me quedo con su hijo hasta que regresemos los tres a casa". Y agregó: "Tenemos ansiedad por lo que pueda llegar a pasar, que esperemos que nada. Esperamos que todo pase de manera favorable para todos nosotros.
"Yo no querÃa aceptar que es un preso polÃtico, porque no tiene nada que ver, él simplemente vino como un ciudadano común, nunca imaginé esto", concluyó la joven.