Hay gestos que devuelven la fe en lo esencial, tal es el caso de Santo David Morales, un hombre de 44 años, ordenanza en una escuela pública de Fiambalá, Catamarca, que el pasado fin de semana protagonizó una historia de amor incondicional.
Sin auto, sin moto y con apenas una botella de agua, Morales recorrió 30 kilómetros en bicicleta, ida y vuelta, junto a su hijo de 9 años, Alexander Benjamín, para que pudiera cumplir su sueño: jugar un partido de fútbol en el Torneo Municipal Infantil Mixto.
“Venía contento, jugó y volvió re contento”, dijo David a Cadena 3 con la voz quebrada.
La escena conmovió a todos. En el trayecto, fueron vistos por Denis Bayón, exjugador profesional y actual veterano del Club Defensores, quien se detuvo, se emocionó hasta las lágrimas y le regaló su pantalón deportivo a Alexander. “Ese padre no necesita lujos, tiene el mayor de los tesoros: un corazón que late por su hijo”, dijo a Multimedios Abaucán
Aunque el partido terminó empatado, la historia se viralizó rápidamente. Las imágenes del padre y su hijo atravesando caminos polvorientos bajo el sol circularon en redes sociales y medios locales, convirtiéndose en un símbolo de lo que representa el verdadero deporte: sacrificio, pasión y unión familiar.
David vive con su esposa y dos hijos en el barrio Pampa Blanca, en Tatón, y asegura que no podía fallarle a su pequeño. “Al partido no se lo iba a perder por nada del mundo”, confesó. Aunque el club y la municipalidad suelen brindar transporte, esa vez no lo utilizó por cuestiones personales.
“Yo enseño a mis hijos que hay que cumplir, que los sueños se construyen con esfuerzo”, afirmó David, quien crío a sus hijos con el mismo amor con el que pedaleó ese día.
Sergio Araya, presidente del Club Sportivo La Ramadita, el equipo de Alexander, destacó que el compromiso de este padre no es novedad. “Nunca falta, siempre está presente para su hijo. Eso es lo que vale”, dijo.
Hoy, Alexander no solo guarda la experiencia de haber jugado un torneo, sino una vivencia que llevará para siempre: la de un padre que, sin medios materiales, le demostró que el amor, la voluntad y el ejemplo valen más que cualquier trofeo.
FUENTE Multimedios Abaucan / Cadena 3.
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