Este domingo se conmemora el Día de la Cocina y la Gastronomía Catamarqueña, fecha que probablemente no muchos catamarqueños tengan en su calendario y es que fue recién en el año 2020 que la Cámara de Diputados y la Cámara de Senadores de la provincia de Catamarca lo aprobaron con fuerza de Ley (Nº 5670), año en el que estábamos atravesando el peor momento de la pandemia por Covid-19, por lo que no fue hasta este último viernes que se pudo realizar la primera celebración.
Este proyecto de ley nace de la iniciativa de la diputada provincial Natalia Ponferrada, con el objetivo de reconocer la gastronomía como parte de nuestro patrimonio identitario y de un bien cultural y productivo. Además, pretende promover a través de la cocina tradicional, la utilización de los productos locales y el desarrollo de la agroindustria local.
¿Por qué un 15 de octubre?
La fecha elegida para conmemorar este día no es azarosa, por el contrario, fue pensada en base a un importante acontecimiento: ese día, en el año 1975, se publicó el primer recetario tradicional “Las Comidas de Mi Pueblo”, obra de la compositora y cantante catamarqueña Margarita Palacios.
Primera celebración
El pasado viernes, para homenajear esta celebración, se realizó un Show de Gastronomía Catamarqueña que tuvo como sede la Casa de la Cultura, frente a la plaza principal de la capital.
Allí, con gran convocatoria de público, se realizaron diversas recetas con productos locales. En primer lugar, Bruno Agüero con la ayuda de Walter Orellana, enseñaron cómo preparar un “Pastel de Mote”, una fusión entre el pastel de novia y el mote, mientras hacían un recorrido histórico sobre los orígenes de los ingredientes de este plato. El postre llegó de la mano de Fernanda Aybar que contó con la asistencia de Agustín Sosa y realizaron alfajores con harina de algarroba, rellenos de dulce de leche con el agregado de quinoa pop. La última propuesta original, llevada adelante por Luciana Ponce y Stefanía Heredia, fue un cóctel denominado “Sonqoy” con base alcohólica de vino blanco torrontés catamarqueño, jugo de pomelo y una infusión de flores de Santa Rita, además ofrecieron una variante sin alcohol de este trago.
Al finalizar cada plato, los asistentes, muchos de ellos turistas, pudieron degustar y dar su opinión a los cocineros.
Expectativas
Como parte de lo proyectado con la aprobación de esta ley, lo que se pretende es fomentar la realización de actividades como la realizada recientemente en cada nuevo aniversario, que nuestros cocineros incluyan en sus recetas productos de nuestra tierra que luego puedan, por qué no, ser incluidas en los menús de los locales gastronómicos de la provincia. En definitiva, fomentar la producción, elaboración y difusión de comidas y preparaciones vinculadas al desarrollo agro productivo de la provincia.