Una inédita foto reveló el pasado que une a 2 íconos de la música argentina: Walter Olmos y Carlos "La Mona" Jiménez. En una imagen en blanco y negro, capturada en un momento casual en Catamarca, se observa al cuartetero cordobés sonriendo mientras lustra los zapatos de un amigo de la joven "Locomotora". Pero, ¿cómo fue que estos dos artistas tan influyentes se cruzaron en el camino?
La vida de Walter Olmos se tejió como un poncho en las calles de Catamarca. Lavando autos, lustrando zapatos, vendiendo diarios y enfrentando precariedades. Olmos tuvo una infancia con varios desafíos. Sin embargo, sus raíces musicales y su pasión por el cuarteto, heredada de su madre fanática de La Mona, lo impulsaron a la música.
En 1998, cuando La Mona llegó a Catamarca para un show en La Casona, los jóvenes que solían seguirlo se cruzaron nuevamente con él y la complicidad se profundizó en un desayuno compartido. El encuentro marcó la vida de Walter, que tenía 15 años, y sus amigos.
La foto después del desayuno capturó un momento único. La Mona fue quien lustró los zapatos de aquellos chicos de la calle en el hall del Hotel Leo III, justamente al lado de Walter, casi como un presagio de que el joven iba a ser tan grande como su ídolo.