Catuchas

Catamarca y los casinos online ilegales: furor y jóvenes en riesgo de adicciones

Cada vez es más común saber de catamarqueños que hacen apuestas online y de personas con muchos seguidores que intermedian como "cajeros".
Por Gustavo Pinto

En los últimos años, las apuestas ilegales en casinos clandestinos en línea tuvieron un crecimiento exponencial en el mundo, moviendo cifras millonarias y generando preocupación entre las autoridades y la sociedad en general. Catamarca no está siendo la excepción y cada vez es más frecuente ver a jóvenes que son influyentes en redes sociales, ofreciéndose como "cajeros". Hay una tendencia de apostadores de hasta 25 años que caen en la ludopatía sin contención alguna.

Una de las principales problemáticas reside en la proliferación de "cajeros" que buscan convertirse en intermediarios de estos casinos clandestinos. Estos individuos se encargan de canjear el dinero de los apostadores por fichas en plataformas de juego en línea, aprovechando la informalidad del negocio y las ganancias tentadoras que ofrece. Según informes, algunos cajeros populares pueden llegan a obtener ganancias mensuales de hasta 600 mil pesos, un incentivo peligroso para aquellos que buscan una forma rápida de obtener dinero fácil.

Influencers y "conocidos" de redes

En un principio, era una cosa de influencers extranjeros que fue llegando en oleadas a los argentinos y actualmente, cualquier persona que tenga muchos seguidores en Instagram, por dar un ejemplo, se pasa el día subiendo a stories este tipo de "ofertas". Otras vías de sumar clientes son los grupos de Facebook y de Whatsapp.

Sin embargo, es importante destacar que estas actividades son completamente ilegales y aunque suene difícil de ocurra, hasta podrían derivar en penas de cárcel que pueden alcanzar los 3 a 6 años. A pesar de ello, existen numerosas plataformas de juego en línea no registradas en Argentina que operan ilegalmente, atrayendo a jugadores incautos con promociones y a través de las redes sociales.

Los cajeros actúan como reclutadores, recibiendo comisiones sobre las pérdidas de los apostadores y buscando estar disponibles casi las 24 horas del día para atraer cada vez más jugadores a esta peligrosa actividad.

Grupos de Whatsapp, Facebook y cuentas de Instagram promoviendo la clandestinidad.

En Argentina, las plataformas de juego en línea legales deben contar con el dominio ".bet.ar". Sin embargo, durante la pandemia del COVID-19, el juego en línea tuvo un crecimiento significativo, y se estima que la mayoría de las apuestas se realizan en plataformas ilegales que operan al margen de la ley. Este mercado clandestino genera ingresos de aproximadamente miles de millones de dólares, una cifra alarmante que indica la magnitud del problema.

Los cajeros utilizan billeteras virtuales como MercadoPago, Ualá, Brubank, Modo u otras para realizar transacciones, lo que dificulta aún más su rastreo.

Existe una franja vulnerable de adolescentes que a diario se van convirtiendo en ludópatas en potencia a causa de estas apuestas ilegales y no tienen ningún tipo de contención. Es necesario concientizar sobre los riesgos asociados a estas prácticas, antes de que sea muy tarde.