Fue un importante poeta, escritor y ensayista catamarqueño. Nació en Belén el 15 de noviembre de 1898. Por su amor a la tierra sufrió en varias oportunidades encarcelaciones. Fue detenido por defender el agua de riego, respaldando a los labriegos y por ser considerado enemigo del gobierno y de la sociedad. Durante su vida escribió alrededor de 52 obras; 18 versos y 34 prosas. Murió el 1° de junio de 1988.
Luis Leopoldo Franco fue hijo de Luis Antonio Franco y de Balbina Acosta de Franco. Poco antes de terminar la escuela primaria, su familia se trasladó a la capital de la provincia para realizar los estudios secundarios. Franco regresó a su pago amado a los 19 años, en 1917. En 1918 a sus 20 años, ganó su primer premio de honor en el certamen literario Juegos Florales, con su Oda Primaveral.
El trazo de un camino peculiar: "La vida sin libertad no es vida (...)"
El escritor realizó el servicio militar en Buenos Aires durante el cual pasó gran parte del tiempo en el calabozo a causa de su temperamento. Durante varios años, Franco alternó entre el ajetreo de la ciudad de Buenos Aires y la vida campesina en Belén.
Simpatizaba con las ideas de León Trotsky (a quien le escribió un poema homenaje a pocos días de su asesinato) y participó de la revista “Estrategia” junto con Nahuel Moreno y Milciades Peña, entre los años 1933 y 1965, adhirió al PST (Partido Socialista de los trabajadores). Fue censurado y poco reconocido por sus contemporáneos locales, debido a su ateísmo y su carácter intransigente.
"Fue un gran crítico de la iglesia y su influencia en la sociedad catamarqueña. Señaló y denunció el fuertemente el conservadurismo político de la provincia", explica Julia Tiraboschi, estudiante del Profesorado de Letras de la UNCA, la cual ha investigado y trabajado en torno a la obra del escritor.
Un reconocimiento en la lejanía:
Recibió el premio de honor de las SADE (Sociedad Argentina de Escritores) recién en el año 1984, donde según sus palabras tuvo que aceptarlo finalmente ya que le daba vergüenza seguir negándose a recibirlo. Lo mismo sucedió con el gran premio de honor de la Fundación para la Poesía. También fue galardonado con el premio KONEX (diploma al merito en la disciplina poesía).
"El reconocimiento de su obra fue excepcional, porque primero fue valorado fuera de la provincia, a nivel nacional e incluso fuera del país. Fue convirtiéndose en un referente, tanto por su obra en sí como por su vida transgresora", explica Celia Sarquís, reconocida escritora catamarqueña.
Falleció el 1° de junio de 1988, próximo a cumplir 90 años, en la localidad de Ciudadela, provincia de Buenos Aires, donde vivió sus últimos años en soledad y pobreza. Luego de su muerte, los legisladores provinciales lanzaron con fuerza de Ley la instauración del 15 de noviembre como “Día del Poeta Catamarqueño”, en conmemoración al natalicio del gran poeta y ensayista.