Corría el invierno de 1999 en San Antonio, un pueblo del departamento catamarqueño: Fray Mamerto Esquiú. El boliche bailable "La Casona" albergaba una noche más de bailanta. La noche del 25 de junio, Rodrigo Bueno estaba en Catamarca pero como telonero del grupo "Los Zarza". Personas que estuvieron presentes en la velada comentaron que mientras Rodrigo era entrevistado por medios locales, logró ver fragmentos del un show reciente de Walter Olmos.
El catamarqueño logró cautivar a "El Potro". Rodrigo automáticamente se interesó por Walter, quien con tan sólo 17 años conquistaba la escena local. Esa misma noche quiso llevárselo de gira con él. En cuestión de hora se encontraba golpeando la puerta de sus padres en el barrio Alem, para pedirles permiso para poder "apadrinarlo" y llevarlo a mini tour de dos días por Norte Argentino.
La madre de Olmos le explicó a Rodrigo que su hijo "no tenía ropa" para acompañarlo. Tras algunas negociaciones los dos lograron emprender este viaje que consolidaría su cercanía y amistad. Años después Noemí (madre de Walter), comentaría sobre los elogios Rodrigo a su sucesor más pequeño: "Lo que a mí me llevó años, él en menos de un año se metió a la gente en el bolsillo".
"El Potro Rodrigo" apadrinaría al joven Walter en sus primeros pasos para presentarse ante multitudes a nivel nacional. Su amistad duró hasta la muerte trágica de Rodrigo en 2000. Walter nos dejaría también en una muerte sospechosa dos años después, en el 2002.