El profesor Daniel Lonzalles, del cuerpo docente de la Escuela Nº 69 de Villa Dolores, dialogó con el programa Catamarca a Diario, de Radio Inforama, y se refirió a la situación que atraviesan los docentes tras la confirmación por parte del Poder Ejecutivo de la derogación del decreto 884.
“Tenemos todavía conflictos abiertos en cuanto a la devolución de los cargos de los docentes que han sido desplazados en Valle Viejo, en la Escuela 69, en la EPEC Nº 7, en Chumbicha, y si empezamos a nombrar son muchas las escuelas en la provincia donde los docentes quedaron sin cargo, por supuesto que fue antes del 884”, señaló.
Lonzalles también mencionó los compromisos asumidos por funcionarios de : “A nosotros nos recibió el secretario de Educación, el doctor Leandro Luna, quién nos dijo que, a través del decreto 884, todo se iba a solucionar, que esto era un malestar momentáneo, que todos iban a recuperar el lugar de trabajo. Pero en realidad el papel de uno, cuando lo comenzó a estudiar, era una situación totalmente contraria.”
En cuanto a los objetivos del reclamo docente, Lonzalles explicó que “el primer punto a seguir es la restitución de los docentes cesanteados. Un segundo punto es abrir nuevamente las paritarias”.
En relación a la situación salarial, recordó sus primeros años en la actividad: “Cuando yo comencé en la docencia, ya en el 98, mi primer recibo de sueldo que lo encontré sin querer el otro día era de 450 pesos. Al valor de esa fecha estamos tomando el dólar en 450 dólares, y hoy en día, 27 años después de trabajo, es mucho menos de la mitad que uno llega a cobrar, ya teniendo en cuenta antigüedad y demás ítems que le van engrosando el sueldo.”
Por último, cuestionó la falta de respuestas del gremio docente: “Yo estoy afiliado a ATECA, hace 27 años. Es la primera vez que yo necesito algo de Ateca. Me cansé de llamarlo hasta que el día lunes recién me atendieron. La respuesta fue: ‘No, si esto es pasajero, usted no se preocupe, es titular, en cualquier momento va a reubicar las horas’. Esa fue la respuesta que tuve.”
En el cierre de la nota, expresó: “A nosotros nos hace mucho ruido, nos hace pensar que firmaron algo sin leer o que directamente pasó algo más entre Educación y los gremios. Entonces, sabemos que no tenemos representación gremial, sabemos que las personas que realmente estamos preocupadas por esta situación no vamos a poder participar de la toma de decisiones, pero sí le queremos decir, ya sea a los gremios o al ministerio, que estaremos, si es preciso, en la calle los días y el tiempo que sea necesario para que la educación vuelva a ser respetada como tal."
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