Durante su participación en foros del sector minero, Jalil defendió el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI), al que consideró “clave para atraer capitales”. Aseguró que, entre los proyectos presentados y los que se proyectan, Catamarca podría alcanzar una cifra cercana a los 5.000 millones de dólares en inversiones. "La minería no es que tenga futuro, es una realidad", afirmó, subrayando además su valor para estabilizar la macroeconomía junto con el petróleo, el gas y la economía del conocimiento.
El mandatario destacó que estos desarrollos deben ir acompañados por un cambio de matriz económica regional y mejoras en infraestructura. “Lo importante es que se levante un pueblo, pero también que se genere una nueva dinámica productiva”, dijo, mencionando iniciativas como la exportación de lana de vicuña, el impulso al turismo y la creación de la bodega de vino más alta del mundo. También valoró el trabajo conjunto con las provincias del NOA y la mesa del cobre para posicionar a la región en el contexto de la transición energética global.
Respecto al panorama nacional, Jalil expresó optimismo: “Creo que ya pasó lo peor y que vamos a estar bien”. Sin embargo, advirtió que el crecimiento debe ir acompañado por una distribución más equitativa de la riqueza, poniendo el foco en el interior profundo del país. En este sentido, pidió decisiones concretas sobre obras de infraestructura como rutas nacionales para lograr una integración federal real.