
El ex fiscal municipal Daniel Ortega, quien ocupó su cargo durante la gestión del exintendente Gustavo Roque Jalile, aseguró que la obra de cloacas ejecutada por la empresa Coarco fue una estafa a la comunidad, con deficiencias técnicas graves, negligencia procesal y una condena millonaria que hoy debe afrontar el municipio.
Ortega reveló que fue él quien inició las denuncias penales y presentó una acción judicial preventiva contra la empresa y el Estado provincial, encargado de supervisar la obra. Según explicó, los peritajes oficiales y una inspección judicial determinaron graves fallas estructurales, como caños mal colocados, desniveles en el sistema de desagüe y hundimientos del suelo.
“Se logró paralizar la obra con una medida cautelar gracias a una pericia técnica oficial que advertía sobre la imposibilidad de continuar la obra en esas condiciones”, detalló Ortega.
Sin embargo, tras dejar su cargo, el proceso judicial fue abandonado, y se declaró la caducidad de la acción, lo que dejó al municipio sin defensa frente a los reclamos de Coarco. Como resultado, la Justicia condenó a Valle Viejo a pagar más de $160 millones en honorarios legales a favor de los abogados de la empresa y del Estado provincial.
“Había pruebas sólidas para exigir que la empresa reparara los daños y ejecutara la obra como corresponde. Pero el juicio fue dejado morir por intereses que hoy perjudican a todos los vecinos”, sentenció Ortega.
El exfiscal también denunció la negligencia de la administración posterior a Jalile y señaló que “la propia municipalidad no solo abandonó el juicio, sino que fue el Estado quien pidió la caducidad de la causa”.
Según Ortega, esta obra no solo no cumple su función, sino que representa un ejemplo grave de corrupción, desidia institucional y perjuicio económico directo para una comuna que hoy enfrenta una deuda millonaria.
“La responsabilidad política y técnica es total, tanto del Ejecutivo Municipal como del Gobierno Provincial. Todos miraron para otro lado”, denunció.