La inflación de abril se ubicó en 2,8%, marcando una baja significativa frente al 3,7% de marzo, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Se trata del primer índice mensual luego de la eliminación del cepo cambiario y la adopción de un régimen de bandas para el dólar, que permitió fluctuaciones entre los $1.000 y $1.400. El dato interanual, en tanto, arrojó un acumulado del 47,3%, lo que refleja una desaceleración sostenida del ritmo de incremento de precios.
El informe se conoció en un contexto de fuerte expectativa, ya que muchos analistas temían un impacto inflacionario mayor tras la liberalización cambiaria. Sin embargo, el presidente Javier Milei había anticipado en una intervención pública que "ni el tipo de cambio ni los precios reaccionaron de forma drástica", buscando transmitir calma frente a un escenario de alta sensibilidad económica. La contención del índice alimenta la narrativa oficial sobre una estabilización progresiva del mercado.
El rubro Alimentos y Bebidas no alcohólicas, el de mayor incidencia en todas las regiones, subió un 2,9% “por los aumentos en Carnes y derivados, Leche, productos lácteos y huevos y Pan y cereales”, apuntó el Indec.
Las divisiones que tuvieron mayor aumento en abril fueron Restaurantes y hoteles (4,1%), por subas en los alimentos y bebidas consumidos fuera del hogar, Recreación y cultura (4%), principalmente por incrementos en Servicios recreativos y culturales, y Prendas de vestir y calzado (3,8%).