En el día de hoy, el Juzgado de Control de Garantías celebró una audiencia de oposición a la elevación a juicio en el marco del caso contra Mariana Pedraza, la funcionaria judicial acusada por el siniestro vial ocurrido el 13 de marzo de 2022, en el que Lucas Pereyra quedó en condición de cuadriparesia.
Durante la audiencia, la defensa de Pedraza planteó que la víctima fue responsable del accidente, desafiando así las pruebas que apuntan a la imprudencia y conducción temeraria de la acusada.
El hecho, ocurrido en la avenida Presidente Castillo, a la altura de la Punta del Asfalto, involucró el vehículo de Pedraza, quien embistió la motocicleta de Pereyra. Este choque causó graves lesiones al joven, quien perdió la movilidad de sus extremidades y quedó con secuelas irreversibles.
La querella, a cargo del abogado Gabriel Díaz, presentó pruebas que respaldan la acusación de "lesiones gravísimas" y defendió que la elevación a juicio se encuentra justificada por la gravedad del hecho y la imprudencia demostrada por Pedraza.
Díaz criticó los intentos de la defensa por revertir la carga de la prueba, sugiriendo que la culpa recaía sobre la víctima. "Han intentado cambiar la narrativa, responsabilizando a Lucas Pereyra, pero las pruebas son claras y demuestran la imprudencia y conducción antirreglamentaria de Pedraza", explicó el abogado en diálogo con los medios. Según Díaz, las pericias y testimonios presentados durante la causa acreditan que la conducta de la acusada fue la causa principal de las lesiones que sufrió el joven.
Lucas Pereyra, quien estuvo presente en la audiencia, expresó su esperanza de que se haga justicia. "Si fuera justa, tendría que haber justicia", manifestó, al tiempo que recordó los intentos de desinformación sobre su estado, asegurando que no estaba alcoholizado al momento del accidente. La decisión final sobre si la causa será elevada a juicio o si regresará a la Fiscalía para más investigaciones quedará en manos del juez Maidana, quien deberá expedirse en los próximos 10 días.