Oscar Arellano, rector de la UNCA habló sobre el proceso de auditorías que llevará a cabo Nación a través de la Sindicatura General de la Nación (SIGEN) y que llevará a que la UBA inicie acciones legales por considerarla una intervención inconstitucional.
“No tenemos ningún problema con ningún tipo de auditoría”, manifestó y aclaró que durante muchos años fue la SIGEN quien auditaba antes de que se estableciera que dicha tarea le correspondía a la Auditoría General de la Nación (AGN), “con buen criterio”.
“La propia SIGEN definió que eso era lo correcto y quedó la posibilidad concreta de que se hicieran convenios entre las universidades con la SIGEN a los efectos del asesoramiento del tema”, agregó.
Explicó que los procedimientos administrativos y contables siguen siendo establecidos por la SIGEN a nivel nacional y que existe un sistema de auditoría interna que se informa mensualmente a la Secretaría de Educación de la Nación.
“Lo que hizo el Gobierno Nacional es volver a un viejo sistema que estaba hace dos años y por mucho tiempo bajo la SIGEN”, explicó a INFORAMA RADIO.
En ese sentido, Arellano comparte ciertos aspectos del reclamo de la UBA, ya que entiende que el Ejecutivo nacional busca descalificar a las universidades públicas, “a la educación en general”. Y expresó que un claro ejemplo de esto son los vouchers otorgados para financiar la educación privada y los bajos números plasmados para el sector en el presupuesto 2025, “que es una foto”.
Sin embargo, se distancia de la Universidad de Buenos Aires cuando esta acusa un intento de intervención de las universidades. Arellano dijo que no le “consta” ni tampoco le “preocupa” que esa sea la intención de Nación.
“Personalmente no tengo ese análisis. Yo creo que la autonomía de la universidad es muy importante y a los efectos de que pudieran intervenir, las razones deberían ser muy importantes y muy fuertes”, agregó.
Con respecto a las tomas que se están llevando a cabo en diferentes casas de altos estudios, comentó que si bien algunos estudiantes quieren llevarlas a cabo de manera permanente, “la no clase”, la mayoría de los estudiantes sí quiere mantenerlas y no perder el año.
“Nosotros como responsables universitarios tenemos que garantizar no solamente el derecho a huelga sino también el derecho a estudiar y el derecho a dar clases. Y con los decanos, nos reunimos la semana pasada, hemos estado conversando y trabajando en el sentido de que ningún chico debe perder el ciclo académico y el cuatrimestre porque en definitiva no estaríamos haciendo las cosas bien si así fuese”, aseveró.