En Aguas Calientes, la crisis alimentaria en el ámbito escolar alcanzó niveles preocupantes. Los estudiantes del nivel secundario enfrentan una grave carencia de alimentos debido a que la partida destinada a los refrigerios solo cubre dos almuerzos semanales.
Esta situación deja a los alumnos, muchos de los cuales provienen de localidades remotas, en una posición difícil ya que no pueden regresar a sus hogares para comer.
Para mitigar el impacto de esta insuficiencia, se puso en marcha una campaña de recolección de alimentos. Esta iniciativa busca proporcionar almuerzos adicionales a los estudiantes afectados, aliviando en parte la situación crítica.
La campaña cuenta con el apoyo de la comunidad local, que respondió de manera solidaria para ayudar a garantizar que los jóvenes reciban una alimentación básica durante sus jornadas escolares.
El profesor Bruno Villagra, comprometido con la causa, solicitó formalmente a las autoridades el envío de fondos adicionales para cubrir los costos de alimentación de los alumnos durante todo el año.