Un joven carnicero tuvo que viajar desde Andalgalá hasta la capital con su mano atorada en una picadora de carne eléctrica. El grave accidente laboral ocurrió el viernes, mientras el muchacho hacía embutidos. En un descuido, la máquina le agarró la mano izquierda.
El joven se encontraba solo, por lo que atinó a desenchufar la picadora y empezó a gritar pidiendo ayuda. Un vecino lo llevó hasta el hospital local, donde le practicaron primeros auxilios y se gestionó la derivación hacia el hospital San Juan Bautista.
"En unas tres horas y media estuvimos en la ciudad, la policía nos estaba esperando y nos acompañaron hasta el hospital. Vino muy dolorido, no había analgésico que lo calme", contó la madre del carnicero.
En el centro de salud, lo intervinieron quirúrgicamente y lo separaron de la máquina. Por fortuna su extremidad no fue triturada y solo tendría un dedo comprometido, señaló la mujer.
"Son accidentes que ocurren en las carnicerías, en un simple descuido. Está estable y tenemos que esperar para ver cómo sigue", finalizó en sus declaraciones a Catamarca en Cana.