Vecinos de Hualfín, departamento Belén, tomaron la Capilla Nuestra Señora del Rosario para impedir que una familia reclame como propio el terreno en el que se encuentra el templo.
Los residentes aseguran que esta acción es un avasallamiento contra su patrimonio histórico y cultural.
La capilla, construida en 1770 y declarada monumento histórico en 1967, es el centro de un conflicto de larga data con la familia Saravia. Esta familia, supuestamente descendiente de los donantes originales del terreno, ahora busca recuperar la propiedad del templo.
Una de las manifestantes explicó: “Se tomó la iglesia porque no tenemos respuesta. Fiscalía penal supuestamente se tenía que hacer cargo, no se hizo y lo pasó a civil. Ya venimos de hace dos semanas con esto y no hay respuesta, no nos dan soluciones. Tomamos esta medida de manifestarnos y tomar la iglesia porque siempre perteneció al pueblo. El municipio siempre se hizo cargo y ahora vino esta familia a quererse adueñar de la propiedad. La iglesia va a ser tomada hasta que las autoridades tomen una decisión”.
Los manifestantes afirman que continuarán con la ocupación hasta que las autoridades intervengan y resuelvan la disputa a su favor.
El conflicto no es nuevo para los habitantes de Hualfín. Durante la pandemia, los Saravia abrieron una calle junto a un control sanitario, lo que generó fuertes críticas. Además, hubo disputas previas por el desvío del agua del río hacia las fincas de la familia, afectando el suministro.
Los manifestantes denuncian que son objeto de amenazas y acoso por parte de la familia Saravia. “Nos graban, nos amenazan con denunciarnos. Vamos a seguir acá con la manifestación dentro de la capilla hasta que tengamos una respuesta de las autoridades porque ya sufrimos muchos agravios de esta familia hacia nosotros, como insultos, maltrato. La iglesia siempre perteneció al pueblo y es injusto que lleguen después de tanto tiempo y ellos se quieran adueñar de algo que ya es un monumento histórico nacional”.