Annelies Wilder-Smith, profesora honoraria de Enfermedades Infecciosas Emergentes de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, en el Reino Unido, y líder de la Comisión The Lancet sobre el dengue, dijo a Infobae: “El COVID es más mortal que el dengue para cada infección individual. Sin embargo, los grupos de edad afectados son diferentes”.
Si se consideran las tasas de mortalidad de los pacientes hospitalizados, la tasa de mortalidad para el COVID se sitúa en el 20%, y para el dengue es del 1%, informó.
Pero si se calcula en base a las infecciones sintomáticas, la tasa de letalidad del COVID es del 0,3%, mientras que para el dengue es mucho más baja. En el caso del dengue, se producen entre 30.000 y 50.000 muertes al año, de un total estimado de 100 millones de casos al año.
La prestigiosa experta aclaró que “el COVID mata principalmente a personas mayores, y el dengue mata a niños y ocasionalmente a adultos. Además, el COVID es una enfermedad mundial, mientras que el dengue se limita a los países tropicales y subtropicales, salvo en contadas ocasiones en que el dengue se extiende a climas más templados”.
En la Argentina, este año se ha enfrentado la peor epidemia de dengue. Entre la segunda quincena de marzo y la primera de abril se registró el pico con un promedio de 56.000 casos semanales de personas con la infección transmitida por las picaduras de hembras de mosquitos Aedes aegypti con el virus.
En la temporada 2022/2023 solo hubo 65 muertes en el país. Esta temporada hubo 314 fallecimientos, según el último boletín del Ministerio de Salud de la Nación.
“El dengue no es más peligroso o mortal que en el pasado por cada infección individual. Pero se observan más casos de muertes en cifras absolutas porque el número de casos ha aumentado en el mundo”, señaló Annelies Wilder-Smith.
Para el doctor Tomás Orduna, ex jefe del Servicio de Medicina Tropical y Medicina del Viajero en Hospital de Infecciosas F. J. Muñiz y miembro del comité científico de la Fundación Mundo Sano, “hoy el COVID es más peligroso que el dengue si una persona que no está vacunada contrae la infección por el coronavirus. La letalidad del COVID es mayor que la del dengue”.
Pero el especialista resaltó que si las personas ya tienen aplicadas las dosis de refuerzo contra el coronavirus, solo sentirán un resfrío leve si quedaran expuestas a la infección por el coronavirus. Eso ocurre gracias a que las vacunas reducen el riesgo de tener cuadros graves.
“Las personas que se aplicaron el esquema inicial de vacunación para COVID en 2021, pero no tienen al día los refuerzos en 2024, corren más riesgo de tener un cuadro grave”, advirtió el doctor Orduna.
En cuanto al dengue, “en 2020 hubo otra epidemia en la Argentina, pero el COVID fue predominante. En 2024 eso cambió y el dengue tuvo mayor impacto desde el punto de vista epidemiológico”, dijo.
“Ya estamos en otoño 2024 y con bajas temperaturas. El riesgo de transmisión de dengue fue bajando en la Argentina, pero la enfermedad va camino a la endemicidad”, señaló el investigador del Conicet y epidemiólogo Pablo Orellano a Infobae.
La estación de alta incidencia de todos los virus respiratorios, incluido el coronavirus, está empezando en el hemisferio sur. Por eso, hoy la preocupación debería ser mayor sobre los virus respiratorios, pero eso no significa que no haya que ocuparse del dengue”, remarcó Orellano.
“El impacto sanitario del COVID en 2020 no se puede comparar con nada conocido en cuanto a enfermedades infecciosas en nuestra historia reciente, afirmó el investigador. Ese año también hubo algunos brotes de dengue, pero nada comparable a la pandemia del COVID. En ese sentido, fue algo incomparable, pero que es difícil que se vuelva a repetir de la misma manera. En cambio, el dengue viene siendo un problema cada vez más grave desde hace décadas, y exceptuando por la esperanza de las vacunas, en general la tendencia es a empeorar”.