En el marco de las festividades marianas y en el 133º aniversario de la Coronación de la Virgen del Valle el magister Marcelo Gershani Oviedo brindó este viernes en el salón Ezequiel Soria del Cine Teatro Catamarca una charla sobre la Historia de la Devoción de la Virgen Morena, acción promovida por la Secretaria de Gestión Cultural.
Con buena asistencia en la sala, el historiador desmembró entre relatos de época, datos, documentos e historias la gran devoción por la sagrada imagen y explicó el porqué de este fenómeno de fe y amor.
Entre las autoridades presentes la directora provincial de Patrimonio y Museos, Edith Cardoso, fue la encargada de presentar al historiador y agradeció la predisposición para compartir su gran trabajo investigativo sobre todo por lo que significa para los fieles esta temática tan especial de este gran ícono del noroeste como lo es la sagrada imagen.
“No dudo cuando se trata de hablar sobre este tema. Cuando me invitan siempre es oportuna la temática y la posibilidad de compartir esta investigación de muchos años, realmente es un trabajo de archivo arduo y quiero agradecer a la Universidad Nacional de Catamarca por acompañarme y poder hacer un trabajo en conjunto”, señaló el magister en su presentación.
De esta forma inició la charla, desmembrando historias y cruzando datos para adentrarse en el relato. Recordó que la imagen fue fabricada probablemente en el Alto Perú y traída a Catamarca por los españoles Luis de Medina o su esposa, que la imagen se encontraba en la Capilla de Pueblo del Indio de Choya ya que las demás poblaciones no podían albergarla generando una disputa entre pueblos.
“En abril de 1695 la imagen de la Virgen del Valle es trasladada desde la Población del Valle hacia la ciudad de San Fernando. En lo que es hoy la ermita en Valle Viejo donde inició la devoción, la imagen estuvo más tiempo que en la Gruta de Choya que, en ese momento, era un nicho en el cerro. Eso generó diferencias entre pueblos por lo que la imagen era prácticamente robada, por eso es que aparecía en Valle Viejo y después en Choya, porque la robaban”, aclaró el licenciado Gershani.
En su investigación aborda el estudio de la peregrinación como manifestación de la devoción a la imagen de la Virgen del Valle que se reitera de principios del siglo XVII hasta la actualidad. En 1640 llega el primer peregrino conocido, se trata de Bernardo Ordóñez de Villaquirán, Teniente de Gobernador en la provincia de La Rioja, que deja asentado en un documento que se ausentó de esa ciudad al Valle de Catamarca para visitar y hacer unas novenas en la iglesia de Nuestra Señora de la Limpia Concepción.
En el año 1875 el Doctor Federico Espeche escribe: “Catamarca tiene una imagen sagrada en la que depositan la fe de sus creencias atrayendo en derredor del objeto sagrado las plegarias de Santiago, Tucumán, Salta, La Rioja y Córdoba. La Virgen del Valle es milagrosa y el ocho de todos los diciembres la ciudad de Catamarca es una romería donde millares de paisanos y forasteros hacen oración en un altar”.
“Si no hubiese devoción la imagen de la Virgen del Valle estaría guardada en un altar dentro de un museo, pero como decía Lafone Quevedo hay imágenes mucho más lindas, pero esta es la que despertó y genero la devoción de la gente”, recordó Gershani.
También compartió una valoración de su trabajo: “Normalmente hago este trabajo y me gusta compartirlo cuando me invitan, porque sepan que a este tema dedico mucho tiempo”, por lo que es importante apreciar el trabajo del magister.
En el cierre del encuentro se abrió una ronda de preguntas entre el público presente que generó un ida y vuelta de datos y curiosidades