El Observatorio de Argentinos por la Educación, publicó el dato de que “tres de cada diez alumnos de los sectores más favorecidos de la Argentina no alcanzan el nivel mínimo de lectura en la prueba PISA 2022”.
La coordinadora de Transparencia y Relevamiento del Observatorio Argentino por la Educación, Eugenia Orlicky, una de las autoras del Informe junto a Irene Kit (Asociación Civil Educación para Todos) y Martín Nistal, dijo al respecto que los datos provienen del “operativo PISA que evalúa en 81 países a chicos de 15 años en lengua, matemática y hace algunas preguntas importantes sobre su escolarización”.
“Lo que buscamos mostrar con este informe es que el problema en la educación argentina es sistémico. Muchas veces varios sectores piensan estar eximidos del problema de la escolarización argentina, pero encontramos, por ejemplo, que Argentina está solo por debajo de Guatemala, El Salvador, Panamá y Honduras en cuanto a resultados en sus sectores más favorables, que Brasil, Chile, Perú, los cuales tienen mejores resultados que Argentina en el cuarto de CIL. Entonces vemos que tres de cada diez están con problemas de lectura, y cuando vamos al sector más bajo vemos que son siete de cada diez”.
“Dividimos a la población en cuartiles, en grupos de 25%. Este grupo de 25% más favorecido de Argentina, cuando uno lo compara con los grupos más favorecidos de otros países, está en un nivel más alto, es decir que tiene un nivel mayor de riqueza pero tiene peores resultados en lectura. Entonces muestra ahí ya una falencia, porque muchas veces uno asocia el nivel socioeconómico con los resultados, pero cuando se compara entre países que tienen un peor nivel socioeconómico que Argentina, este cuarto cuartil, están teniendo mejores resultados, es decir que el sistema educativo está funcionando de una manera mejor en esos países”, agregó.
De lo que resulta que "los estudiantes argentinos más ricos, son los segundos más ricos de la región, aún así, tienen peores resultados en la prueba PISA de Lectura 2022 que sus pares de Chile, Uruguay, Colombia, Perú y México", arrojó el informe.
También explicó que para realizar el informe trabajan con especialistas que les sugirieron incluir algunas variables que se preguntan en PISA. Por lo que: “Nos metimos con una variable que se le pregunta a los estudiantes, de si creen que la inteligencia se puede cambiar y el 50% de los argentinos piensa que no, o como en el caso de la perseverancia, el 70% dice que cuando empieza una tarea la termina, y el 30% dice que no la termina”.
“Cuando uno cruza los datos, se ve nuevamente que los que tienen mejores resultados son los que piensan que la inteligencia se puede cambiar, aquellos que por ahí piensan que la inteligencia no se puede cambiar son los que tienen peor resultado. Hay una correlación, es decir que hay que trabajar en la autoestima y en la perseverancia de muchos de nuestros estudiantes”, sostuvo.
Según Orlicki, estos datos son áreas en las que se pueden implementar cambios en la población para no quedarse solamente en los resultados: “Empezar a pensar un poco más allá de los números para poder sacarle más jugo a la encuesta y trabajar dentro de las escuelas con algunos temas”, comentó.
Finalmente, la coordinadora dijo que “en el informe preguntamos a la gente qué piensa de la educación y muchas veces piensan que la educación está mal, pero el 50% piensa que la educación de sus hijos está bien. Entonces lo que buscamos es generar alertas de que se debe seguir trabajando por la educación argentina”.
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