Ayer la presidenta Anahí Díaz se reunió con el gobernador Raúl Jalil y parte del gabinete para llevar detalles del contexto que hay en Catamarca. “Nosotros queríamos plantearle lo que había resultado de la reunión del Consejo Federal de urgencia que se llevó a cabo en Buenos Aires hace un par de semanas que fue la declaración de emergencia del sector dado que estaba peligrando la vida de las empresas, de todas las empresas del país y los puestos de trabajo de más de 200.000 personas”.
En declaraciones al programa Catamarca a Diario de INFORAMA RADIO, Díaz especificó que los problemas giran en torno a la paralización del 100% de la obra pública financiada por Nación, a lo que se suma que “hasta la fecha no está designada ninguna autoridad para el Ministerio de Infraestructura a nivel nacional. Entonces, tampoco tenemos firmas para que se cancele la deuda que ya venía de arrastre al momento de cambio de las autoridades”.
En el encuentro de ayer el Estado provincial se comprometió a financiar las obras locales y desde la Cámara vieron esto como que “el Gobernador entiende la delicadeza de la situación, por lo tanto, se comprometió a ver la forma de cancelar la deuda que tiene la Provincia con las empresas constructoras por los avances de obras ya realizadas”.
Díaz en la entrevista citó la particularidad del caso de Valle Chico donde se estaban construyendo más de 500 viviendas, que quedaron con un avance del 80% y sin la infraestructura de los servicios. “Son muchas las familias que hoy están con desempleo y la verdad que nosotros que estamos cerca de estas personas”, dijo, y a su vez contextualizó que a raíz de esto se produce una parálisis de trabajo indirecto como los quioscos barriales o los corralones.