El Ministerio de Salud adquirió un Electroencefalógrafo (EEG) para llevar a cabo diferentes diagnósticos. Servirá para realizar una determinación rápida y fehaciente de la ausencia de actividad cerebral o de flujo sanguíneo encefálico.
De esta manera, el artefacto brindará una nueva herramienta fundamental para la salud pública, en lo que denominan como un “momento tan crítico de la atención”.
“Esto nos va a llevar a tener una independencia en un punto tan fundamental como es el diagnóstico del cese de las funciones cerebrales”, destacó Marcelo Lobo, referente de la Coordinadora de Ablación e Implante de Catamarca (CAICA) y agregó: “Es un gran logro para la salud pública tener este aparato de última generación a disposición de todos los hospitales de nuestra provincia”.
Además, el Dr. Lobo explicó al respecto: “Estamos muy contentos en el Ministerio de Salud por recibir el electroencefalógrafo, que mediante proyectos de inversión, se presentó a Incucai (Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante) desde la provincia”.
¿Para qué sirve?
Un electroencefalograma (EEG) es un estudio que mide la actividad eléctrica en el cerebro mediante pequeños discos de metal (electrodos) colocados sobre el cuero cabelludo. Las neuronas cerebrales se comunican a través de impulsos eléctricos y están activas todo el tiempo, incluso mientras duermes. Esta actividad se manifiesta como líneas onduladas en un registro electroencefalográfico.
Un electroencefalograma puede detectar cambios en la actividad cerebral que pueden ser útiles para diagnosticar trastornos cerebrales, especialmente epilepsia u otros trastornos convulsivos. Un electroencefalograma también puede ser útil para diagnosticar o tratar lo siguiente:
- Tumores cerebrales
- Daños cerebrales por lesiones en la cabeza
- Disfunciones cerebrales que pueden tener diversas causas (encefalopatía)
- Trastornos del sueño
- Inflamación del cerebro (encefalitis herpética)
- Accidente cerebrovascular
- Trastornos del sueño
- Enfermedad de Creutzfeldt-Jakob
También puede usarse para confirmar la muerte cerebral en una persona que se encuentra en un coma persistente. El electroencefalograma continuo se usa para ayudar a determinar el nivel adecuado de anestesia para una persona que se encuentra en un coma inducido por medicamentos.