Un bebé de tan solo un mes de edad fue ingresado de urgencia al Hospital de Niños debido a una otorragia, un sangrado en uno de sus oídos. El traslado se realizó bajo el protocolo de clave roja, asegurando una atención médica inmediata para el lactante.
Actualmente, el bebé se encuentra bajo observación en el nosocomio infantil, donde se llevará a cabo una evaluación detallada para determinar las causas del sangrado y brindar el tratamiento adecuado.
La otorragia, definida como un sangrado por uno o ambos oídos, puede ser un síntoma de diversas afecciones relacionadas con el sistema auditivo. Desde otitis no tratadas debidamente hasta traumatismos, rotura de tímpano, presencia de cuerpos extraños o incluso tumores en el oído, las causas son variadas. Ante este tipo de hemorragia, es crucial no intentar detener el sangrado y buscar atención médica de inmediato, según señalaron algunos expertos.
El diagnóstico de una otorragia implica una evaluación minuciosa por parte de los especialistas. Se realiza una exploración física del oído, preguntando sobre síntomas asociados como hipoacusia, vértigos, fiebre y dolor. Además, se puede llevar a cabo un análisis de la historia clínica del paciente y, si es necesario, obtener muestras para un análisis más detallado. El tratamiento de la otorragia dependerá de las causas subyacentes que hayan provocado el sangrado.