En un hecho que generó la intervención policial en la Comisaría Quinta, una joven de 19 años intentó introducir pastillas, presuntamente barbitúricos, junto con alimentos destinados a un recluso de apellido Agüero.
La acción fue descubierta durante una rutinaria requisa, llevada a cabo por los agentes de la comisaría, quienes constataron la presencia de las sustancias prohibidas entre la comida.
Posteriormente, se determinó la detención de la mujer, la cual quedó bajo resguardo policial mientras se investigan los motivos y las circunstancias de este intento de ingreso de sustancias controladas a la prisión. Este tipo de acciones constituye un delito y puede tener implicaciones legales significativas.
Los barbitúricos, sustancias que se presume estaban involucradas en el intento de ingreso, son una familia de fármacos con propiedades sedantes del sistema nervioso central. Además de su potencial para inducir sueño y relajación, estos compuestos también tienen efectos analgésicos y anticonvulsivos.
Sin embargo, su uso es menor en la práctica médica debido a su alta propensión a la adicción y a los riesgos asociados con la sobredosis.