La fiscalía concluyó una exhaustiva investigación en la que se recopilaron pruebas y testimonios de las víctimas que denunciaron los casos de estafa. Las acusaciones señalan que la imputada se valía de una variedad de estrategias fraudulentas para engañar a las personas y obtener dinero de ellas.
Según el informe de la fiscal, la mujer de 33 años se presentaba ante sus víctimas como una profesional altamente calificada en el campo legal y prometía una amplia gama de servicios.
Entre los cuales se destacaban desde representación en asuntos legales hasta la compra y venta de propiedades y vehículos. A cambio de estos servicios, solicitaba pagos por adelantado, pero no cumplía con ninguna de sus promesas.
El juicio que se avecina será un importante paso en el proceso legal para determinar la culpabilidad de la acusada y asegurar que se haga justicia para las víctimas afectadas por sus acciones fraudulentas.