La última cifra de inflación presentada por el INDEC resalta un aumento del 6,3% en el mes de julio, marcando un regreso al crecimiento luego de una disminución en junio. La variación interanual muestra una disminución al 113,4%, especialmente influida por la menor incidencia en los incrementos de alimentos.
Este año, los aumentos acumulados llegaron al 60,2% en el séptimo mes, indicando que se mantiene la proyección de una inflación de tres cifras para lo que resta del 2023. A pesar de un incremento mes a mes en junio, se anticipa una aceleración inflacionaria más marcada en agosto y septiembre debido a la devaluación.
Dentro de los sectores con mayores incrementos en julio, se destacan la comunicación, con un alza del 12,2%, y la recreación y cultura, que experimentó un aumento del 11,2%, impulsado por las vacaciones de invierno. Por otro lado, las prendas de vestir y el calzado aumentaron en un 3%, y la vivienda y servicios lo hicieron en un 4,2%, quedando por debajo del promedio general.
El impacto de los aumentos de precios se reflejó de manera más pronunciada en la región de la Patagonia, donde la inflación alcanzó el 7,8%. La región pampeana le siguió con un incremento del 6,4%.
El INDEC también proporciona un listado mensual de productos que se miden en el Gran Buenos Aires, mostrando las variaciones de precios a lo largo del mes. Entre las mayores subas se encuentran la papa con un 34,1%, la cebolla con un 19,7% y el azúcar con un 17,1%. Por otro lado, el tomate redondo bajó un 24,2%, la naranja descendió un 2,3% y el limón cayó un 0,4%.
Esta información revela un panorama de fluctuación de precios que afecta a diferentes sectores de la sociedad y regiones del país, influyendo en las decisiones de consumo y en la economía en general.