La emblemática capilla Nuestra Señora del Rosario fue testigo de importantes sucesos a lo largo de la historia y actualmente sufre las consecuencias de la falta de mantenimiento y el paso del tiempo. Ubicada en San José de Piedra Blanca, en Fray Mamerto Esquiú, la joya arquitectónica del siglo XVIII y Monumento Histórico Nacional desde 1941, fue otra vez blanco de actos vandálicos.
Personas desconocidas irrumpieron en el templo, rompiendo una de las puertas con la aparente intención de sustraer algunos objetos. El hecho habría ocurrido en la madrugada de este lunes. Un vecino alertó a la Policía, que acudió al lugar para constatar los daños en la puerta de madera de algarrobo.
Los residentes de la zona solicitan una mayor seguridad para proteger el importante patrimonio. No es la primera vez que ocurre un hecho de estas características. El año pasado, se reportó un acto similar, y en otra ocasión se robaron cables subterráneos de la plaza ubicada frente a la capilla.
