Después de 2 días de intensas negociaciones entre autoridades del IPV y los ocupas, el conflicto por la toma de las 28 viviendas sociales en Huaco Sur, Belén, finalmente se resolvió. La protesta se había originado por denuncias de presuntas irregularidades en el listado de adjudicatarios.
En una acción voluntaria, los ocupantes dejaron las viviendas y se llegó a un acuerdo: las próximas unidades habitacionales a ejecutar serán entregadas a las personas que encabezaron la toma. La ministra de Trabajo, Verónica Soria, y autoridades del IPV lo garantizaron.
El acuerdo pone fin a la tensión en la zona y garantiza una solución justa para los ocupantes y para aquellos que estaban a la espera de una vivienda social. Pero no todo fue pacífico. Previamente se vivieron momentos de tensión cuando la Policía sacó por la fuerza a un ocupante que se resistía a abandonar una de las viviendas.
Supuestamente llevaba consigo velas y nafta, lo cual se advirtió como algo peligroso. Sin embargo, algunos manifestantes desmintieron esa versión y se quejaron del accionar policial. Simultáneamente, el gobernador Raúl Jalil se encontraba en el departamento porque estaba previsto que presida el acto de entrega del mencionado barrio a las 16 horas. Se pudo efectuar tras la solución del conflicto.